El Partido Liberación Nacional está llamado a gobernar y devolverle a Costa Rica la seguridad económica, social, educativa y política que este país merece. Pero solos no lo pueden hacer ya que hay un sector de la población que se encuentra en un formato anti partidos políticos que elegirán a cualquiera (sin importar los costos de esa decisión) antes que lo que les huela o perciban como más de lo mismo. Por eso es que el PLN con CARAS DIFERENTES (diferentes no necesariamente significan “nuevas”) debe plantearse la necesidad de aspirar en coalición para el 2026 con otros partidos que se coman la bronca de los que no lo han hecho por falta de capacidad y de inteligencia emocional.
Al Partido le ha faltado coherencia a la hora de pronunciarse sobre algunas cosas sobre todo a su secretario general, Miguel Guillén. Tenemos un secretario general que hace casi tres años fue electo por la vía de una componenda entre el arismo y el figuerismo y luego sale criticando los cacicazgos en el partido, quien lo entiende; pide caras nuevas para los puestos de elección venideros pero como asesor legislativo del diputado Rodrigo Arias no opinó lo mismo y fomentó su designación en la fracción, ojo, que para mí era la mejor opción para el país una presidencia de don Rodrigo, pero a lo que voy es la falta de coherencia; otro ejemplo es su ataque a que en el PLN no se “hereden” las diputaciones, pero su padre fue diputado y el ahora aspira a serlo también. En lo personal creo que las personas pueden aspirar si sus capacidades y el apoyo popular lo permita independientemente de como se llamen pero no se puede señalar o criticar algo que evidentemente también afecta al que apunta con el dedo acusador. Por eso creo que el PLN requiere coherencia y Miguel Guillén no la tiene.
El partido como estructura tiene una inactividad producida por la ansiedad de algunos por aspirar a puestos políticos y afectan el nacimiento de nuevos liderazgos sobre todo en la juventud liberacionista y en las caras diferentes que yo llamo, que son esos dirigentes que siempre hemos estado ahí bregando, ayudando, sacando el agua del bote pero que a veces nos cansamos de intentar ayudar a un partido donde solo algunos acceden al poder; por ejemplo, estatutariamente el secretario general debe encabezar el trabajo de las Secretarías temáticas y al día de hoy luego de tres años don Miguel Guillén ni las termina de definir ni las juramenta para que trabajen en esas nuevas ideas de las que hablo. Pasado el proceso de elecciones municipales don Miguel Guillén como secretario general, asumió la responsabilidad de las derrotas sufridas y dijo que renunciaría, siete meses después no lo ha hecho.
Hay personas muy valiosas en el PLN, algunos en los puestos de decisión y yo considero que nadie sobra y todos faltan. No se puede señalar con un dedo y decirle a alguien que se aparte solo porque me estorba en mis pretensiones. Todos en el partido son importantes para la gran tarea que se debe hacer en Costa Rica por reconstruir una patria dañada por tres gobiernos seguidos de gente inexperta y soberbia. Las canas de la experiencia con las ganas de la juventud para luchar por un país mejor.
