San José, 26 set (elmundo.cr) – La Fábrica Nacional de Licores (FANAL) emprendió una serie de acciones para exportar su línea Cacique, como parte de un plan estratégico para compensar la caída de las ventas de sus licores en el mercado nacional, sin embargo, estos esfuerzos pueden también estar siendo menoscabados por el comercio ilegal y el contrabando.
Según explicó Álvaro Salas, administrador general a.i. de FANAL, en una inspección realizada la semana pasada en 7 establecimientos entre mini supermercados y licoreras, en la zona de San Ramón, se encontraron unidades de Cacique de exportación en 3 de ellos, existe la posibilidad de que este producto haya sido introducido de nuevo al país para su venta de manera ilegal, ya que no habría pagado los impuestos correspondientes para su comercialización aquí en Costa Rica.
“La cantidad de producto encontrado es mínima en relación con el total exportado, no se tiene certeza de su origen ni de la cantidad que puede haber en el país. Esta situación es preocupante para la FANAL, ya que mientras hace grandes esfuerzos para llevar y posicionar la marca Cacique en mercados con un gran potencial en ventas como Canadá, Estados Unidos y otros países de América del Sur, inescrupulosos podrían estar trayendo el producto de regreso ilegalmente”, agregó Salas.
Esta situación ya está siendo investigada por las instancias competentes. “FANAL trabaja con las autoridades para combatir el comercio ilegal de licores, colaborando siempre con la Fuerza Pública y la Policía Fiscal como un informante clave y participando en los operativos para decomiso. Además, toma medidas a lo interno con el propósito de evitar en lo posible el uso y comercio indebido de sus productos”, aseguró Salas.
El mercado nacional de licores está caracterizado por la distorsión, se comercializan licores de contrabando y falsificaciones, lo cual pone en peligro la salud de los costarricenses ya que no se garantiza la calidad del producto consumido.
