San José, 24 sep (elmundo.cr) – El Plenario Legislativo le dio primer debate al expediente 23.290 que contiene el tercer presupuesto extraordinario del presente año, por un monto superior a los ₡34,566 millones.
Gran parte de los cuales son recursos del Fondo de Desarrollo Social y Asignaciones Familiares (Fodesaf), que serán trasladados al Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS) para la entrega de ayudas a familias de escasos recursos y becas de los programas Crecemos y Avancemos.
El congresista del Partido Unidad Social Cristiana, Alejandro Pacheco, dijo que este tercer presupuesto muestra la madurez de todos los legisladores de oposición quienes le dieron un trámite expedito, para dotar al Gobierno de la República de recursos para que pueda atender sus urgentes necesidades.
Pacheco también resaltó el acuerdo logrado hace pocas semanas cuando, dada la urgencia de recursos para los programas del PANI, para transporte de estudiantes del MEP y para dotar de gasolina a los carros del Ministerio de Seguridad Pública, se llegó a un acuerdo y se tramitó por aparte esas partidas, en un cuarto presupuesto que se dispensó de la mayoría de los trámites.
Aunque le dio su voto afirmativo, el parlamentario del Frente Amplio, Jonathan Acuña, dijo que le queda un sabor agridulce, porque en medio de lo positivo hay otros que le generan un rechazo como es el aumento del 98% a los ministros y para lo cual se incluyen ₡270 millones para hacerle frente.
A la posición que expresó Acuña se unieron sus compañeros de bancada Sofía Guillén y Ariel Robles, quienes enfilaron sus críticas más duras a los recursos presupuestados para el aumento a los ministros y viceministros decretado por el Presidente de la República, pero, en cambio, separó de su puesto al titular de la CCSS, por el aumento a los funcionarios de esa institución.
El legislador del Partido Liberación Nacional, Gilberth Jiménez, también indicó que este presupuesto le deja un sinsabor pues en este se notan irresponsabilidades, improvisaciones y falacias del gobierno anterior que no financió gastos por comisiones, resoluciones o devoluciones que eran obligatorios.
