En un mundo donde las organizaciones de salud enfrentan retos cada vez más complejos, el Hospital Monseñor Sanabria vuelve a demostrar por qué es considerado el mejor hospital de Centroamérica. Con una visión clara de futuro, bajo el liderazgo del Dr. Randall Álvarez y el Ingeniero Kleiber Rojas Varela, hemos impulsado un programa innovador que marca un antes y un después en el desarrollo humano: Pelícanos de Cambio.
¿Por qué un pelícano? Esta ave majestuosa es símbolo de liderazgo genuino, trabajo en equipo y sacrificio por el bienestar del grupo. En la naturaleza, los pelícanos trabajan coordinadamente para cazar, protegerse y sobrevivir; cada uno entiende su rol y lo cumple con excelencia. Así también debe ser nuestro personal: conscientes de que, para sostener y elevar aún más el prestigio del Hospital Monseñor Sanabria, debemos actuar como una bandada sincronizada, comprometida y resiliente.
El programa Pelícanos de Cambio, impulsado a través del programa Vive Bien, representa más que una capacitación: es una transformación cultural. Aquí, no solo enseñamos liderazgo y trabajo en equipo desde la teoría, sino que aplicamos dinámicas donde se aprende haciendo. Los funcionarios experimentan situaciones que los retan, fortalecen su motivación, cuidan su salud mental y les permiten interactuar con compañeros de distintos departamentos, fomentando la verdadera colaboración interdisciplinaria.
Esta metodología innovadora rompe con los esquemas tradicionales de capacitación, donde los aprendizajes eran mayoritariamente materiales o teóricos. Como Doctor en Educación, puedo afirmar que vivir una experiencia formativa genera un impacto profundo y duradero. Hoy estamos sentando las bases para que las capacitaciones del futuro en la CCSS no solo transmitan conocimientos, sino que transformen personas y equipos.
El Hospital Monseñor Sanabria, a través de Pelícanos de Cambio, se convierte en el primer hospital de la región en asumir un enfoque de innovación humana de esta magnitud. Con visión clara, fomentamos nuevos liderazgos, fortalecemos el trabajo en equipo y construimos un modelo replicable en toda la institución. Estamos forjando un hospital no solo excelente en su infraestructura y servicios, sino también en el corazón de quienes lo hacen posible cada día: su gente.
La historia de los pelícanos nos enseña que la verdadera fuerza está en el equipo, en el liderazgo compartido y en el compromiso de cada miembro. Así, con cada acción, con cada dinámica, con cada desafío, estamos elevando juntos el vuelo hacia un futuro más fuerte, más humano y más brillante para el Hospital Monseñor Sanabria.