El ensilaje de follaje de yuca en la alimentación animal

Todos conocemos la yuca (Manihot esculenta) como un cultivo para alimentación humana. También sabemos que la harina de yuca es una fuente energética rica en almidones que se utiliza para la alimentación animal. La principal fuente de alimentación que son los pastos que limitan su biomasa y calidad; generalmente relacionados con el cambio climático manifestados por periodos de lluvia que degradan los suelos por erosión o en una prolongada sequía. Uno de los desafíos que enfrentan los ingenieros zootecnistas y los veterinarios es buscar métodos que le permitan integrar fuentes alternativas de alimentación y que estas tengan gran aceptación y un alto valor nutritivo que en su medida suplan no solo el déficit de calidad forrajera sino también su escasez durante las épocas seca. Uno de estas alternativas es la hoja de yuca. Es un forraje que se puede usar en la alimentación de rumiantes, sin embargo, al tratar de conservarla en forma de ensilaje, su elevada humedad representa un inconveniente, por lo que se deben buscar alternativas para reducir la humedad y mejorar la calidad y consumo del material ensilado. El follaje de yuca se caracteriza por poseer un alto nivel de proteína cruda (22% en promedio), el cual se asemeja al que presenta la alfalfa (Medicago sativa). El ensilaje de hojas de yuca se usa con el objetivo de disminuir el contenido de cianuro y para bajar el inconveniente de los niveles de materia seca y carbohidratos solubles, ya que estos dos factores son determinantes en la fermentación de un ensilaje. Para esto se deben quitar los pecíolos (las partes más gruesas) y dejarlo al aire para que se oree. También se recomienda agregar entre el 5% y el 10% del peso en melaza diluida y algún material como tuza de maíz para bajar la humedad y prevenir pérdidas de ensilaje.

Hay variedades de yucas forrajeras que además de producir la raíz tienen una buena producción de biomasa, capaces de producir de 25 a 70 toneladas por hectárea. Normalmente en los cultivos de yuca para alimentación humana su parte aérea, compuesto por hojas y tallos, es descartado en el proceso de cosecha y representa alrededor del 20,2% del peso total de las raíces. Estas partes según la variedad son fuentes importantes de biomasa con buenos contenidos de proteína cruda. En la foto observamos un cultivo de yuca forrajera, joven y con una alta densidad de siembra.

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