Redacción, 25 may (VOA)- Irlanda comenzó a votar el viernes en un referéndum sobre el aborto que puede ser un hito en la senda de cambios de un país que hace sólo 20 años era uno de los más conservadores de Europa.
Las encuestas sugieren que los votantes irlandeses están dispuestos a anular una de las prohibiciones más estrictas del mundo sobre el aborto. El primer ministro Leo Varadkar, a favor del cambio, dijo que el referéndum era una oportunidad “única en una generación”.
Los votantes del país, que una vez fue profundamente católico, responderán a la pregunta de si quieren eliminar una prohibición consagrada en la Constitución por referéndum hace 35 años, y que fue parcialmente modificada en 2013 para permitir sólo casos en los que la vida de la madre estaba en peligro.
Irlanda ha cambiado rápidamente. Legalizó el divorcio por en 1995 por una ajustada mayoría, pero hace tres años se convirtió en el primer país del mundo en aprobar el matrimonio gay por votación popular.
La lucha de décadas en torno al aborto ha generado un encendido debate que ha dividido a partidos políticos, ha relegado a un segundo plano a la otrora poderosa Iglesia y ha sido un test para los gigantes mundiales de Internet sobre cómo gestionan la publicidad en redes sociales durante campañas políticas.
A diferencia de 1983, cuando la religión centraba el debate y el derecho al aborto era un tabú para la mayoría, esta vez la campaña se ha caracterizado por las experiencias personales de las mujeres.
“Creo que es lo correcto para las mujeres irlandesas – cuidado, compasión, dignidad y seguridad. La atención sanitaria igualitaria es por lo que votaré ‘Sí’”, dijo Joanna Faughan, de 33 años, que votaba en el barrio de Castleknock, en el norte de Dublín, donde había colas antes de la apertura de los colegios electorales a las 0600 GMT.
La campaña por el “Sí” argumenta que con más de 3.000 mujeres viajando a Reino Unido cada año para abortar – un derecho recogido por un referéndum en 1992 – y otras encargando píldoras online de forma ilegal, el aborto ya es una realidad en Irlanda.