Paolo Guerrero, el dueño de la pelota en la noche de Temuco

Paolo_GuerreroREPORTAJE

Por Ariel Greco (dpa)

Temuco (Chile), 26 jun (dpa) – Salió del vestuario con el balón del partido debajo del brazo y no lo soltó durante las innumerables entrevistas que brindó tras el pase de Perú a las semifinales de la Copa América: Paolo Guerrero, el artífice de la clasificación peruana con sus tres goles ante Bolivia, fue el auténtico dueño de la pelota en la noche de Temuco.

Como había ocurrido en el encuentro por el tercer puesto ante Venezuela en la pasada edición del certamen, Guerrero anotó un “hat-trick” para el 3-1 definitivo. Así cortó con la sequía que traía desde la fase de grupos, donde no había podido convertir.

“Por suerte pude volver al gol, lo estaba buscando y no se me daba. Sin dudas, el equipo ayudó para eso, tuvo un gran funcionamiento colectivo”, remarcó el “Depredador”, que llegó al torneo con poco ritmo, ya que hace dos meses y medio contrajo dengue mientras jugaba en Corinthians.

“Él estuvo parado un tiempo y era lógico que le costara encontrar la mejor forma. La posibilidad de encontrarse con el gol de cara a lo que se viene es importantísima”, afirmó su entrenador, Ricardo Gareca. “Es bueno para él, es bueno para nosotros. Lo tomaba como algo lógico al proceso que atravesó”, añadió el técnico, que siempre lo sostuvo entre los titulares.

Es que a pesar de la mala racha, la capacidad combativa de Guerrero nunca quedó en duda a lo largo del torneo. Una muestra de ello la marcan las estadísticas, que indican que fue el jugador que más faltas recibió en la fase de grupos con 14 y, junto con el brasileño Fernandinho, el que más cometió con 12.

Pero más allá del cambio en la fortuna, del funcionamiento colectivo y de encontrar su mejor forma, el goleador también destacó que la llegada a Chile de su novia Alondra sirvió como cábala para cortar la racha: “Es mi amuleto, ya le dije y creo que me aporta muchísimo”.

A los 20 minutos, Guerrero recibió un centro de Juan Vargas y venció a Romel Quiñónez con un cabezazo esquinado. Tres minutos más tarde, definió ante la salida del arquero después de una asistencia de Christian Cueva. Y a los 74′ sentenció el partido con una excelente definición, luego de interceptar un pase de Danny Bejarano.

De esa manera llegó a 24 goles con la camiseta de la selección peruana y quedó a sólo dos de Teófilo Cubillas como máximo artillero del país. Y pareció darle la razón a su compañero Jefferson Farfán, que lo elogió tras el encuentro.

“Para mí, Paolo es el mejor nueve de la historia del fútbol peruano. Y de todos los nueve que conocí, es el mejor con el que jugué”, aseguró el atacante del Schalke 04.

Curiosamente, Guerrero nunca jugó en el torneo peruano, ya que saltó desde las divisiones juveniles de Alianza Lima directo al equipo B del Bayern Múnich, con apenas 18 años y sin haber debutado en la primera división de su país.

Pero el repertorio del flamante hombre de Flamengo no se limitó sólo a goles: incluyó asistencias, faltas recibidas y hasta lujos, como un pase con cambio de piernas que provocó la reacción de sus adversarios, que interpretaron que los estaba provocando. “Se molestaron por la pisada que hice. No la voy a dejar de hacer, porque esto es fútbol”, sostuvo el ex delantero del Hamburgo.

Con la clasificación asegurada y la confianza por las nubes, Guerrero redobló la apuesta para la semifinal ante Chile. Ya aseguró que quiere eliminar a los anfitriones y repetir el título de goleador del campeonato como ocurrió en Argentina 2011.

“Estoy tranquilo, mi objetivo es llegar a la final. Espero meter más goles y poder superar los cinco que hice en la Copa América de Argentina en el 2011”, dijo el delantero de 31 años y un nombre asociado al gol: su padre lo eligió en honor a Paolo Rossi, goleador del Mundial de 1982, última edición que disputó Perú, un año y medio antes de que naciera Guerrero.

Integrante de una familia repleta de futbolistas, entre ellos su hermano Julio “Coyote” Rivera y su tío José Gonzales Ganoza, recordado arquero fallecido en la tragedia aérea del plantel de Alianza Lima en 1987, Guerrero apuesta todo por ganar ante Chile.

“Hay que tener tranquilidad, será un partido lindo para jugar porque son clásicos. Que pongan a Chile como favorito, nosotros vamos a jugar de la misma manera. El partido será difícil sólo porque ellos juegan en casa”, disparó el “Depredador”, con tanta certeza como cuando le apunta al arco.

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