Un contrato con todas las firmas de las partes involucradas contradice la versión sostenida durante meses por Leo Cova, presentado en su momento como gerente general de la Asociación Deportiva Guanacasteca (ADG), y por Jorge Arias, presidente del club.
Tanto Cova como Arias aseguraron públicamente que existió la intención de formalizar un acuerdo de cesión de la licencia, pero que este nunca llegó a concretarse porque “faltaban firmas”. Sin embargo, el documento al que este medio tuvo acceso en exclusiva, dentro del expediente que hoy se ventila en el Tribunal Contencioso Administrativo, sí contiene todas las rúbricas requeridas.
El Contrato de Cesión de Derechos de Administración establece la entrega de la gestión administrativa de la ADG al grupo inversor encabezado por Cova. Entre sus cláusulas principales se estipula:
- La cesión plena de los derechos de administración de la ADG al grupo encabezado por Leo Cova.
- La definición de responsabilidades financieras, operativas y administrativas a cargo de los inversionistas.
- El reconocimiento de la ADG como parte cedente, con la firma de Jorge Arias en representación del club.
- La aceptación de las condiciones por parte del grupo inversor, con la firma de Leo Cova.
La existencia de este contrato firmado desmonta el discurso oficial de la dirigencia pampera, que había insistido en que todo quedó en una simple “intención” y no en un acuerdo legalmente vinculante.
Antecedentes
La Asociación Deportiva Guanacasteca (ADG) perdió su licencia para competir en la Primera División, decisión que fue confirmada por el Comité de Licencias de la Federación Costarricense de Fútbol (FCRF).
¿Cómo inició todo?
En el segundo semestre del 2024 surgieron rumores sobre un grupo de inversionistas, supuestamente extranjeros, interesados en tomar el control de la ADG. Por meses fue solo especulación, hasta que el 25 de febrero de este año, ElMundo.CR comprobó mediante una investigación periodística la existencia de un acuerdo preliminar entre Jorge Arias, presidente del club; Leonardo Cova, dirigente mexicano; Jorge García, también azteca; y Rónald Freer, representante de la sociedad DMV Events.
La propuesta era crear una nueva sociedad anónima en la que la ADG quedaría como parte minoritaria. El monto pactado para la cesión se fijó en $1 millón, según confirmó el propio Freer.
El Comité de Licencias abrió una investigación antes de la publicación del reportaje. En marzo notificó a la ADG sobre los hallazgos y otorgó un plazo de descargo. Sin embargo, el 16 de abril el comité resolvió revocar el derecho de participación del club, tras un análisis de prueba documental y testimonial.
La posición de la ADG
En comunicados oficiales y entrevistas, tanto Jorge Arias como Leo Cova negaron la existencia de un acuerdo vinculante. Cova incluso minimizó su papel, afirmando que firmó solo un “contrato laboral” con el club. Arias, por su parte, pidió tiempo y negó que se hubieran concretado negociaciones de fondo.
Luego de la sanción, la ADG elevó el tono en un comunicado:
“Para evitar daños irreparables a nuestro club y al resto de los equipos de la Primera División, solicitaremos la reprogramación del juego previsto para el próximo domingo ante Cartaginés, así como de todo nuestro calendario. De lo contrario, buscaremos a toda costa la paralización o nulidad del campeonato, incluyendo al campeón, el descenso y los cupos a Concacaf”.
Los artículos cuestionados
El Comité de Licencias se habría basado en dos apartados clave del Reglamento de Licencias:
- Artículo 18: obliga a notificar cualquier cambio de administración al comité.
- Artículo 77: establece sanciones por la omisión de documentación financiera.
¿Qué pasará ahora?
La ADG ya fue desafiliada de la Unafut, mientras en el Tribunal Contencioso Administrativo avanzan dos procesos que podrían definir el futuro inmediato del club pampero.
24. ADG CONTRATO DE CESIÓN DE DERECHOS DE ADMINISTRACIÓN 2025