El combate estuvo a la altura con las expectativas. Ambos boxeadores dieron un espectáculo al intercambiar golpes fuertes y directos durante los 12 asaltos.
Ninguno sufrió una caída y tampoco terminaron con heridas muy visibles. Eso sí ambos pudieron calzar potentes golpes a los rostros, haciendo vibrar al público.
Golovkin fue el agresor de principio a fin, pero sin poder derribar al ídolo mexicano. Álvarez supo responder en sus intercambios con “Triple G”.
La pelea mantuvo la intensidad hasta los últimos segundos, y contrario a lo que se creía, los pugilistas cerraron con mucha fuerza, aunque si se notaba un cansancio acumulado, no dejaron de lanzar golpes y se tuvo que apelar a las tarjetas.
Un juez señaló al “Canelo” como victorioso por 118-110, otro apuntó un 115-113 a favor de Golovkin y uno tercero registró un 114-114.