San José, 29 nov (elmundo.cr) – Al igual que lo hicieron el domingo en horas de la tarde, diputados del bloque opositor de la Asamblea Legislativa se retiraron del salón de sesiones del Congreso este martes para romper el quórum y dar por aprobado, sin votación, el Presupuesto Nacional 2017.
De los 57 legisladores que conforman el Parlamento y estaban convocados para hoy a las 15:00 horas, con el fin de discutir y votar en segundo debate la autorización de gastos para el Gobierno Central durante el próximo año, solamente 40 se presentaron a la sesión, dos más que los requeridos para poder arrancar la sesión, sin embargo, llegada las 20:45 horas, varios se habían retirado, al punto que se rompió el quórum.
Para esa hora, más de la mitad de los legisladores que se habían anotado para hacer uso de sus 15 minutos de discurso había culminado las intervenciones.
Diputados de los partidos evangélicos adelantaron que su voto sería en contra al presupuesto, producto de los recortes que acordó la Comisión de Hacendarios al Patronato Nacional de la Infancia (PANI). Los diputados del Frente Amplio también anunciaron que sus nueve votos serían negativos.
Ante este escenario, varios diputados empezaron a retirarse del salón, alegando cansancio, que tenían otros compromisos o bien, que esperarían en sus oficinas a que culminaran las intervenciones.
Durante toda la sesión, legisladores del Partido Acción Ciudadana (PAC) y Liberación Nacional (PLN) estuvieron negociando. Esto generó malestar en los legisladores del Frente Amplio, a lo que Gerardo Vargas Varela exigió que se hiciera público el contenido de las conversaciones.
Franklin Corella, diputado subjefe de fracción del PAC indicó que los recortes al PANI ya eran irreversibles y que por eso, estaban negociando un presupuesto extraordinario para el mes de enero, en el que se devolverían los 47.831 millones de colones a esa institución.
La mayoría de los legisladores que abandonaron el salón de sesiones eran de la bancada de Liberación Nacional y Acción Ciudadana. El último en abandonar el recinto parlamentario fue Julio Rojas, del partido verdiblanco.
Ocho diputados no asistieron del todo a la sesión, pues se reportaron incapacitados, de viaje en el exterior o están en las localidades afectadas por el paso del huracán Otto sobre nuestro país la semana anterior.
Según una comprobación hecha por EL MUNDO se retiraron del bloque opositor Julio Rojas, Juan Luis Jiménez, Silvia Sánchez y Ronny Monge del PLN, Mario Redondo de Alianza Demócrata Cristiana y Gerardo Vargas Rojas del PUSC.
Del partido de Gobierno se ausentaron Víctor Morales Zapata y Henry Mora.
Con la acción tomada por los congresistas, el Presupuesto Nacional para el 2017 fue aprobado en segundo debate.
El plan de gastos del Gobierno Central costarricense para el próximo año llega a los ¢8.9 billones de colones, de los cuales ¢4.8 billones de colones se obtendrán mediante recaudación y el restante, mediante deuda interna y externa.
Del monto global, ¢6,469 billones de colones, equivalente al 72,3% del Presupuesto Nacional se destinará al gasto corriente.
Los diputados redujeron ¢11.969 millones colones al presupuesto original enviado por el Ministerio de Hacienda. Cifra similar se redistribuyó entre varias instituciones.
El Gobierno había ofrecido a la oposición un presupuesto extraordinario con recorte de 20.000 millones de colones, –superior al que quedó aplicado– a cambio de sus votos favorables a otro informe que no contenía recortes en áreas sensibles como el Patronato Nacional de la Infancia (PANI), Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), Ministerio de Salud y hasta el Instituto Meteorológico Nacional (IMN), sin embargo, el bloque no accedió.
Esta es la primera vez en la historia costarricense que los diputados aprueban un presupuesto nacional sin haberlo discutido ni votado en el Plenario del Congreso, en ninguno de sus dos debates.
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