Mauricio Batalla, exministro de Obras Públicas y Transportes, pagó ¢3 millones a una exempleada de su restaurante para que solicitara el archivo de un proceso judicial en su contra por tres supuestos abusos sexuales. Así lo reveló La Nación este miércoles, citando información obtenida por Telenoticias.
El caso judicial, identificado bajo el expediente 22-000681-0994-PE, se originó por hechos ocurridos en un negocio de Batalla ubicado en San Pedro de Montes de Oca y en el parqueo de un centro comercial. La Fiscalía Adjunta de Género había acusado penalmente al entonces ministro, pero el proceso se cerró después de que la presunta víctima solicitara el archivo del caso en noviembre del 2024.
Un pacto previo a la audiencia
El acuerdo de confidencialidad, firmado el 6 de noviembre del 2024—cinco días antes de la audiencia preliminar—, estableció el pago de ¢3 millones en un solo tracto, con la condición de que la mujer pidiera la revocatoria de la apertura de juicio ante la autoridad judicial. Además, Batalla asumió el pago de los honorarios de la Defensa Civil de la Víctima por ¢200.000.
El documento también incluía una cláusula de confidencialidad que impedía a la presunta víctima divulgar detalles del caso o del acuerdo alcanzado. Adicionalmente, Batalla se comprometió a no tomar represalias contra ella o su familia.
Consecuencias y polémica
Con la solicitud de la mujer y su confirmación durante la audiencia del 11 de noviembre, el Juzgado Penal del Segundo Circuito de San José ordenó el sobreseimiento definitivo del caso, lo que archivó el proceso de manera irreversible.
El caso se hizo público después de que Batalla anunciara su retiro de la vida política este miércoles, argumentando que se había filtrado información de un expediente judicial de su “vida personal del pasado”. En su mensaje, el exministro aseguró que había sido declarado inocente y denunció que su situación estaba siendo utilizada para atacar al movimiento chavista.
Sin embargo, la información revelada por La Nación y Telenoticias demuestra que el caso no corresponde a un hecho lejano en el tiempo, sino a una situación que se resolvió hace apenas cinco meses, cuando Batalla aún formaba parte del gabinete de gobierno.
El exministro, quien era visto como una posible figura del oficialismo rumbo a las elecciones del 2026, dejó el camino despejado para Laura Fernández, exministra de la Presidencia y principal ficha del chavismo en la futura contienda electoral.
