El nitrógeno y el amoníaco juegan un papel importante en la calidad del ensilaje, ya que están relacionados con el contenido de proteína bruta y el grado de fermentación proteica. El principal objetivo de la producción de ensilaje, es conservar las plantas con una pérdida mínima de valor nutritivo por fermentación de carbohidratos solubles en un ambiente anaerobio en ácidos orgánicos, preferentemente ácido láctico, que reducen el pH. La calidad de la fermentación de los ensilajes tiene un efecto importante sobre la ingesta, utilización de nutrientes y producción de leche y carne. Conservar el valor nutritivo del forraje cosechado hasta que sea utilizado en la alimentación, tiene una alta importancia económica en los sistemas de producción animal. NITRÓGENO EN LOS ENSILAJES La presencia de nitrógeno en las plantas destinadas a la elaboración de ensilaje en la forma de proteína o como componente no proteico, tiene influencia en la calidad fermentativa y valor nutritivo de este. Los factores que más intervienen en el contenido de proteína del forraje son la especie, estado fenológico de las plantas y fertilización nitrogenada previo al corte. Sin embargo, la proporción de nitrógeno proteico (75%) y no proteico (25%) que posee el forraje fresco, cambia en forma importante durante la conservación del forraje como ensilaje. El nitrógeno total en un ensilaje proviene principalmente de las proteínas presentes en el forraje. Este nitrógeno es un indicador del contenido de proteína bruta (PB), y es esencial para la nutrición animal.
NITRÓGENO EN SILOS CON PROCESO DE CONSERVACIÓN DEFICIENTE
En un ensilaje mal conservado, más del 75% del nitrógeno puede solubilizarse principalmente en forma de amoníaco. Además de la pérdida que representa en el valor nutritivo de la proteína, estos cambios se contraponen con la reducción del pH y dificultan la estabilización del ensilaje. En pastos con bajo contenido de proteína, el consumo y la digestibilidad son afectados por la falta de nitrógeno en el rumen, más aún si este se encuentra parcialmente solubilizado, situación que genera una baja en la eficiencia de utilización de este nutriente. CUANTO NITRÓGENO AMONIACAL SE TOLERA EN EL ENSILAJE Y IMPORTANCIA EN LA CALIDAD
DEL FORRAJE Y CONSUMO ANIMAL La relación que se debe conseguir en un ensilaje entre el nitrógeno amoniacal y el nitrógeno total (NH3 /NT) debe ser inferior a 5%. La presencia de amoníaco en un nivel superior a 5% indica un desarrollo de la flora butírica proteolítica y un aumento del contenido de nitrógeno soluble, que, entre otras consecuencias, disminuye el consumo animal cuando se alimentan con este tipo de ensilajes.
En los ensilajes elaborados en forma correcta, las proteínas se degradan principalmente a péptidos y aminoácidos. En ensilajes donde por mala elaboración se producen desvíos fermentativos, es habitual la proliferación de clostridios donde hay una severa degradación de los aminoácidos, situación que genera niveles elevados de nitrógeno amoniacal. COMO LOGRAR NIVELES BAJOS DE NITRÓGENO AMONIACAL EN LOS ENSILAJES Un alto contenido de NH₃-N indica descomposición excesiva de proteína, lo que reduce el valor nutritivo del ensilaje. También puede estar asociado a mala conservación, bajo pH inicial, o materia prima con alto contenido de humedad.
Para lograr que los ensilajes posean un bajo nivel de nitrógeno amoniacal, se debe considerar lo siguiente: Evite cortar las plantas para ensilaje antes de 60 días post última fertilización nitrogenada. Cortar el forraje en el momento óptimo de madurez (ni muy tierno ni muy pasado), n utilice altas dosis de fertilizaciones nitrogenados previo a separar los potreros para elaborar ensilaje. Evitar exceso de fertilización nitrogenada antes del corte, elabore los ensilajes bajo el sistema de pre marchito, utilice aditivos biológicos para permitir una rápida fermentación inicial y así evitar la proteólisis en las primeras etapas de elaboración del ensilaje, haga un perfecto proceso de picado, compactación y sellado que permita lograr en forma rápida la anaerobiosis necesaria para evitar la proteólisis de las proteínas contenidas en el forraje, si es posible medir pH y NH₃-N como indicadores de la calidad del ensilaje.