Acosta, 19 mar (elmundo.cr) – El Concejo Municipal de Acosta, en la sesión ordinaria no. 138-2019, celebrada el 13 de febrero aprobó el Reglamento de presupuestos participativos del cantón de Acosta y el Manual de procedimiento de presupuestación pública participativa de la municipalidad.
Estos instrumentos tienen como objetivo hacer más eficiente y eficaz la utilización de los recursos públicos y crear espacios para que la ciudadanía pueda hacer sus propuestas e influir en la toma de decisiones en cuanto a los gastos públicos y las inversiones sociales.
Norman Hidalgo, alcalde de Acosta comentó que “los gobiernos locales debemos democratizar nuestra gestión, que no sea solo el alcalde y
el concejo municipal quienes decidan al final para dónde van los recursos, si no que los ciudadanos participen en democracia no solo cuando van a votar, si no diciendo dónde y en qué quieren invertir los recursos”.
La elaboración y diseño del reglamento y del manual se dio bajo la asesoría del Instituto de Formación y Capacitación Municipal y Desarrollo Local de la UNED y se contó con la participación de personas integrantes de organizaciones comunales, funcionarios municipales y autoridades locales.
“Lo rescatable de todo esto es que convertimos este proceso en una verdadera democracia participativa, porque nos están dando la oportunidad de participar en aquello que creemos que podemos hacer en nuestras comunidades”, señaló Miguel Fallas, de la Asociación de Desarrollo del Sector Sur de Acosta.
La presupuestación pública participativa, debe ser vista como un proceso de participación democrática y voluntaria a través del cual la población decide, de forma inclusiva, deliberativa, participativa, concertada y en coordinación con las autoridades municipales, la asignación de recursos públicos que serán ejecutados por el municipio para la implementación de políticas sociales y la realización de obras de infraestructura que potencien el desarrollo local.
Estos instrumentos son indispensables para la implementación y sostenibilidad del proceso de presupuestación participativa y facilitan un modelo de trabajo que se pueda replicar para mejorar la calidad de vida de la ciudadanía.
