San José, 16 sep (elmundo.cr)- En el marco de la operación terrestre en Gaza para desmantelar la infraestructura terrorista de Hamás, liberar a los rehenes israelíes del 7 de octubre y garantizar un futuro libre para la población civil gazatí, un desafortunado informe, en el que se acusa a Israel de “genocidio” fue presentado por la Comisión Pillay, ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Para responder a este documento, plagado de afirmaciones sesgadas y manipulaciones de datos, el investigador Salo Aizenberg, entregó un análisis jurídico fechado el 16 de septiembre de 2025, en el que desmonta estas acusaciones de manera clara y contundente.
El académico demuestra con abundante evidencia, que el informe carece del requisito fundamental establecido por la Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio de 1948: la intención específica de cometer este crimen de guerra (dolus specialis) donde se busca exterminar completamente a un grupo humano de cualquier nacionalidad, herencia religiosa o cultural.
Entre las falencias más graves identificadas en este informe se encuentran:
- La escasa mención de Hamás como actor beligerante, ocultando que Israel combate contra más de 30.000 combatientes atrincherados en Gaza.
- El silencio sobre la infraestructura militar de Hamás, incluidos 500 km de túneles, arsenales camuflados en hospitales y escuelas.
- La omisión de la crisis de los rehenes, quienes sufren violencia sexual, tortura y privación de alimentos.
- La dependencia de cifras no verificadas de Hamás, presentadas como hechos mientras se ignoran datos oficiales de las FDI.
Aizenberg subraya que las muertes civiles, son consecuencia directa de las condiciones de guerra urbana y agravadas por la criminal estrategia por parte de Hamás de utilizar escudos humanos. Asimismo, recalca que el sufrimiento en Gaza podría cesar si Hamás liberara a los secuestrados y abandonara el control territorial de la franja; propuesta que el gobierno de Israel presentó desde el mes de octubre de 2023.
Este comunicado se complementa con el artículo previo de Aizenberg Desmontando la afirmación de que el 83% de las víctimas mortales en Gaza son civiles, donde se evidencia cómo la manipulación estadística alimenta narrativas sesgadas en foros internacionales. Disponible en: PorIsrael.org.
Un llamado a la responsabilidad internacional
Las acusaciones infundadas de genocidio no solo calumnian y difaman al Estado de Israel, sino que trivializan el verdadero significado del término, utilizado para describir tragedias históricas como el Holocausto, Ruanda o Srebrenica.
La comunidad internacional debe rechazar narrativas construidas sobre datos manipulados y reconocer la obligación moral de respaldar la liberación de los rehenes y de la propia población civil palestina, rehén de Hamás desde hace casi dos décadas.