San José, 27 feb (elmundo.cr) – Seilyn Jiménez, gerente de Abuelos Café, ha liderado la transformación de una empresa cafetalera familiar en San Carlos de Tarrazú, Costa Rica, logrando exportar su producto a Alemania, Corea y Estados Unidos.
Jiménez aprovechó su conocimiento del sector para superar una crisis de productividad y llevar el café de sus abuelos a mercados internacionales.
“Hace cinco años había baja productividad, las matas de café estaban viejas, el suelo estaba desgastado. Entonces me quedé pensando qué podía hacer para devolver la fertilidad a la tierra y tuvimos que empezar de cero”, recuerda Jiménez. La empresaria no solo se enfocó en la renovación del cafetal, sino también en la parte administrativa, buscando capacitaciones y asesorías.
Abuelos Café, nombrado en honor a los abuelos de sus hijos, es un proyecto familiar que nació bajo el liderazgo de Jiménez. “En la zona donde vivimos, el café es la esencia del lugar, toda gira en torno a él”, relata. Su experiencia abarca desde la recolección hasta la comercialización, y aspira a incursionar en áreas como la cata y el barismo.
A pesar de los desafíos que enfrentan las mujeres en el sector agrícola, Jiménez perseveró. “La gente a veces cree que es más difícil de lo que realmente es. No es fácil, pero hoy en día hay más acceso, más tecnología y más apoyo para crecer”, reflexiona.
“Además, todas podemos lograr lo que nos proponemos, está comprobado que un negocio en manos de mujeres es más próspero y rentable”, añade.
El éxito de Abuelos Café se debe al apoyo de entidades como Procomer, INA, el MAG, el MEIC y la Cámara de Comercio. Actualmente, exportan café verde a Alemania, Corea y cuatro estados de Estados Unidos, además de café tostado a Nueva York y Nueva Jersey.
Jiménez busca consolidar la internacionalización de su café y posicionarlo como un producto de alta calidad. “Quiero que la gente conozca nuestra historia, nuestra pasión y el amor que ponemos en cada grano de café”, concluye.
