La final del Torneo Apertura 2024 fue un golpe emocional para Liga Deportiva Alajuelense. Pese a ser el mejor equipo del semestre en términos de rendimiento, los rojinegros vieron cómo el título se les escapaba en un partido cerrado ante Herediano. Entre los más afectados por la derrota estuvo Celso Borges, quien vivió uno de los momentos más duros de su carrera.
Escena fuerte
Wílmer López, ídolo manudo y actual técnico del equipo femenino del club, compartió una anécdota conmovedora sobre cómo Borges enfrentó la desilusión, durante una conversación con el periodista Josué Quesada.
López relató que, tras el pitazo final, encontró a Celso completamente devastado. “Estaba tirado en el piso, boca arriba, tapándose la cara. Estaba completamente acostado, tapándose, como si quisiera desaparecer”, describió. Ante esa escena, Wílmer intentó consolarlo, diciéndole:
“Se corrió, hicieron todo lo que pudieron. Este equipo tuvo una llegada y un gol. Así es el fútbol, no se puede hacer más”.
Sin embargo, las palabras de consuelo no bastaron. “Celso sacó las manos de su cara, se sentó y me dijo: ‘Luis María, es que yo hice…’”, recordó López. En ese momento, Borges rompió en llanto, incapaz de contener sus emociones. “Me agarró, me agarró y empezó a llorar. Yo también tuve que contenerme. Estaba completamente destrozado”, agregó Wílmer, visiblemente conmovido por la escena.
Un golpe difícil de superar
La derrota dejó una marca profunda en Alajuelense y sus jugadores, especialmente en Borges, un futbolista experimentado que siempre ha sido un referente de liderazgo. La entrega y compromiso del equipo no se vieron reflejados en el resultado, algo que hizo aún más dura la caída.
A pesar del dolor, estas historias reflejan la intensidad con la que los jugadores viven el deporte, y cómo incluso los más fuertes pueden quebrarse ante las emociones de una final. Para Celso Borges y Alajuelense, la derrota no es más que un capítulo difícil, uno que intentarán superar en busca de redimirse en futuros torneos.