El Deportivo Saprissa atraviesa una compleja situación financiera, con una deuda que supera los ₡210 millones, lo cual afecta directamente la habilitación de los permisos de trabajo de sus nuevos fichajes extranjeros: el delantero español Sabin Merino y el extremo argentino Nicolás Delgadillo.
Según información publicada por La Nación, el equipo morado adeuda ₡63,942,391 a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), divididos en ₡45,488,257 correspondientes a una deuda principal y ₡18,454,134 por responsabilidad solidaria o fusión. Además, Saprissa tiene un saldo pendiente de ₡146,733,684 en el portal de Situación Tributaria Virtual (ATV) del Ministerio de Hacienda, correspondiente al Impuesto al Valor Agregado (IVA) del mes de diciembre de 2024. Este monto se encuentra actualmente en cobro administrativo.
El reglamento vigente de Migración y Extranjería establece que, para tramitar permisos laborales, las empresas deben estar al día con sus obligaciones ante la CCSS y con el pago de tributos nacionales y municipales. La verificación de estos requisitos es indispensable para aprobar los trámites.
Esfuerzos por resolver el problema
A pesar de los esfuerzos del club por solucionar esta situación, las deudas se mantienen. La oficina de prensa del Saprissa indicó que “el club está tramitando lo correspondiente con esas instituciones dentro de los lapsos pertinentes para avanzar con la gestión ante Migración”.
Sin embargo, la institución aún no ha brindado detalles claros sobre cómo abordará el pago de estas deudas. Mientras tanto, el técnico José Giacone no podrá contar con Merino ni Delgadillo, quienes siguen sin ser habilitados.