Liga Deportiva Alajuelense celebró por todo lo alto su bicampeonato de la Copa Centroamericana, pero Alexandre Guimaraes no dejó pasar la oportunidad para enviar un contundente mensaje a quienes han minimizado este torneo, entre ellos, Mariano Torres, jugador del Saprissa, quien quedó eliminado en dos ediciones consecutivas ante el Real Estelí y el Antigua de Guatemala.
El estratega manudo no escondió su alegría tras el triunfo 3-1 en el global frente al Real Estelí. Guimaraes festejó efusivamente, bailó, saltó y gritó junto a su hijo, Celso Borges, al momento de alzar el trofeo de campeón. Sin embargo, más allá de la celebración, Guimaraes dejó claro que este título es mucho más que un logro regional; para él, representa un argumento de peso para que Alajuelense sea considerado para el próximo Mundial de Clubes 2025.
“Cuestionar este torneo es no entender el fútbol”
Consultado sobre las críticas que ha recibido la Copa Centroamericana, Guimaraes respondió con contundencia, dejando un dardo que parece dirigido a Mariano Torres y otros detractores:
“Cuestionar si este torneo tiene validez me parece totalmente fuera de todo contexto futbolístico. Liga Deportiva Alajuelense no solo quiere mirar hacia adentro, sino hacia afuera también. Este es uno de los campeonatos más difíciles, y los equipos que compiten acá están buscando crecer. Si estuvieran en nuestra posición, estarían tirando la casa por la ventana para celebrarlo”, expresó.
Estas palabras surgen luego de que Torres, figura del Saprissa, restara importancia al certamen, algo que contrasta con la postura de Guimaraes, quien resalta el nivel de competitividad y los desafíos enfrentados en el camino hacia el bicampeonato.
El orgullo de un bicampeón invicto
Guimaraes destacó la magnitud del logro conseguido por Alajuelense, aludiendo al desempeño invicto del equipo en dos ediciones consecutivas del torneo. Además, afirmó que este título reafirma la seriedad con la que la institución trabaja para consolidarse como referente en Concacaf.
“Estamos hablando de ganar dos torneos del área de forma invicta. Esas son credenciales importantes para ser tomados en cuenta a nivel internacional. Este título tiene un matiz especial, porque no solo es para el club, sino también para toda nuestra afición”, agregó.
El desafío del torneo local
Aunque las celebraciones no han terminado, Guimaraes y su cuerpo técnico ya piensan en el próximo reto: la semifinal del campeonato nacional contra Herediano. Con la confianza fortalecida tras el título centroamericano, el estratega aseguró que su equipo está enfocado en buscar el cetro número 31 para la institución.
“Este título da convencimiento. Estas dos últimas series, contra Antigua y Estelí, nos enseñaron a manejar partidos decisivos. Esa experiencia nos servirá mucho para lo que viene”, concluyó Guimaraes.
Mientras tanto, la Liga sigue en la mira internacional, no solo por su desempeño en el torneo, sino también por su insistencia en ocupar un lugar en el próximo Mundial de Clubes. Con un técnico como Guimaraes al mando, las aspiraciones rojinegras parecen estar más vivas que nunca.
