Por Uri Stilman (dpa)
Nueva York, 14 feb (dpa) – Marco Belinelli medía 1,90 metros y todavía lidiaba con el acné la primera vez que vio al argentino Emanuel Ginóbili. Más de diez años después, el italiano luce una frondosa barba, alcanza los 1,96 y ya fue campeón de la NBA con los San Antonio Spurs.
“Yo lo conocí a Manu cuando jugamos en Bologna (Italia), hace más de diez años. Yo era muy joven, tendría 15, 16 años y ahora volvimos a coincidir en el equipo, volvimos a ganar un campeonato juntos”, recordó el viernes el italiano en Nueva York, donde hoy intentará retener la corona en el concurso de triples.
Belinelli, de 28 años, coincidió con el argentino en el Virtus Bologna en la temporada 2001. El italiano jugó apenas tres minutos en su primer partido profesional. Según recuerda, lo primero que hizo fue encestar un triple y la pelota le llegó luego de una clásica penetración y descarga de Ginóbili. “Era mi ídolo en ese momento”, confesó.
Después de siete años jugando en Italia, Belinelli fue seleccionado en el draft de la NBA por Golden State Warriors. Para entonces, Ginóbili ya había conseguido tres anillos con los Spurs. Hoy, Ginóbili sigue siendo un referente. “Es un espejo en el que me puedo reflejar”, afirmó el italiano.
Cuando Belinelli firmó con los Spurs en 2013 sabía con lo que se iba a encontrar. La química con Ginóbili fue instantánea. “Nosotros nos hablamos en italiano y en los partidos a veces se transforma en una ventaja, porque tenemos muy buena conexión”, reveló.
Belinelli cree que los días de receso por el All-Star servirán a San Antonio para encontrar la mejor versión para el cierre de la temporada, en la que busca repetir título por primera vez.
“Creo que terminamos esta parte de la temporada con dos victorias muy importantes en Indiana y en Detroit. Ahora todos necesitaban un corte, descansar un poco e intentar volver con todo después del All-Star, estar en forma y jugar en equipo y estar listos para los play-offs, que es nuestro foco”, analizó el italiano, que jugó apenas cinco de los últimos diez partidos por una lesión.
El entrenador de los texanos, Gregg Popovich, se encarga de dosificar los esfuerzos de su plantilla. Durante este fin de semana en Nueva York, los únicos Spurs en acción serán el italiano y Tim Duncan, que el domingo disputará su décimo quinto All-Star Game.
“Creo que es un All-Star, un jugador increíble. Se merece estar aquí, porque juega increíble. Tiene 38 o 39 años y sigue jugando a un nivel altísimo. Creo que es un premio que él esté aquí esta semana”, opinó Belinelli.
Duncan tiene 38 años, Ginóbili 37 y Tony Parker 32. La veteranía del “Big Three” de San Antonio no es un tema que preocupe a Belinelli. “Creo que Manu, Tim y Tony son jugadores espectaculares. Pueden estar en el final de sus carreras, pero son grandes, grandes jugadores. Todo el mundo quisiera jugar con ellos”, destacó “Beli”, que promedia 9,8 puntos, 1,8 asistencias y 2,6 rebotes durante su octava temporada en la NBA.
