El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) sostuvieron una reunión clave esta semana para afinar detalles sobre futuras extradiciones desde Costa Rica. Así lo confirmó el subdirector del OIJ, Michael Soto, quien advirtió que “vendrán otras sorpresas” en las próximas semanas.
En declaraciones al programa Nuestra Voz, Soto detalló que ya son cuatro los costarricenses detenidos con fines de extradición, luego de la reforma legal que entró en vigor en mayo y que permitió extraditar nacionales solicitados por otros países.
Los nombres que ya están en el radar público incluyen a Celso Gamboa Sánchez, Edwin López Vega (alias Pecho de Rata), y Jonathan Arias Alfaro, requeridos por Estados Unidos, además de Johnny Angulo Fernández (John Cadenas), solicitado por Italia.
“Esperamos seguir teniendo más. Ayer tuvimos una reunión con la DEA otra vez para ver si ampliamos un poquito la lista de los extraditables”, dijo Soto.
El subdirector fue claro en que las coordinaciones continúan en marcha, aunque admitió que no todo avanza tan rápido como desearían. Aún así, aseguró que hay más casos “pendientes” que podrían concretarse pronto.
Coordinación internacional
Además del trabajo con la DEA, el OIJ mantiene gestiones con embajadas de países como España, Italia, Estados Unidos, Bélgica y Alemania, así como con naciones latinoamericanas, entre ellas Colombia y varios países centroamericanos.
Soto explicó que incluso se retomaron conversaciones con gobiernos que, en el pasado, habían solicitado la captura de costarricenses, pero se les negó por la imposibilidad legal de extraditar nacionales. Ahora, con la nueva legislación, Costa Rica solicita que se reactiven esas órdenes de captura para iniciar el trámite formal.
“Les estamos pidiendo que nos colaboren nuevamente y nos giren las órdenes de captura para empezar todos estos procesos”, puntualizó.
El mensaje del OIJ es claro: la lucha contra el crimen organizado ya no tiene fronteras legales y el país se prepara para responder de manera más firme a los requerimientos de justicia internacional.
