San José, 7 sep (elmundo.cr) – Luis Amador Jiménez, el flamante ministro del MOPT que apuntaba a ser el sucesor de Rodrigo Chaves Robles a partir de mayo 2026, tuvo una caída tan rápida como su ascenso al frente de una de las carteras de mayor exposición mediática en el país.
Cuando Luis Amador fue nombrado al frente del MOPT era un completo desconocido en la esfera política nacional, igual que muchos de los ministros nombrados por Chaves.
Amador un egresado de Ingeniería Civil, de la Universidad Fidelitas, que también cuenta con una licenciatura en Administración de Empresas de la misma universidad, así como un doctorado en Ingeniería Civil en New Brunswick y una Maestría en Artes en Economía de la Universidad de Concordia en Canadá, donde al día de hoy es profesor asociado.
Fue director de Servicios de Ingeniería y Planificación Comunitaria en el Municipio Urbano de Kindersley en Saskatchewan (Canadá), y director de Estudios Técnicos de la Asociación de Construcción de Costa Rica.
En el 2005 durante el gobierno de Abel Pacheco fue miembro de la Junta Directiva del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi). Aquí se podría explicar el supuesto origen socialcristiano que mencionó posteriormente el hoy exministro.
Amador fue una de las sorpresas en los nombramientos de los ministros de Rodrigo Chaves, y al asumir su puesto indicó a los medios de prensa, “estoy empapado de la realidad nacional”.
El ministro Amador era participante frecuente de las conferencias de prensa de los miércoles desde Casa Presidencial y su imagen fue creciendo, siempre de la mano de Chaves.
Así empezó a posicionarse como una de las figuras políticas más destacadas y de mayor aceptación popular, a la par del mismo presidente Chaves y de la diputada Pilar Cisneros, sus índices de aprobación marcaban cifras superiores al 70%.
Fue surgiendo su nombre como posible sucesor de Chaves Robles en el 2026, incluso aparecía en algunas encuestas como la figura con mayor intención de voto de cara a las próximas elecciones. Aspiraciones presidenciales que Amador nunca negó, más bien el mismo se encargaba de decirlo en cuanta entrevista se lo preguntaban.
En una entrevista con EL MUNDO a pocos meses de asumir su gestión aseguraba que el no descartaba ser candidato presidencial, era evidente que lo quería y lo intentaría. Tanto que al pasar el primer año del gobierno nadie dudaba que Luis Amador era el elegido por Chaves para seguir con su proyecto político.
Y ahí empezaron los problemas para el ministro de Transportes, según algunas personas cercanas al gobierno, Amador se desenfocó, sus aspiraciones y su ambición eran muy evidentes, generando las primeras molestias de Rodrigo Chaves, que le exigía cumplir primero con las funciones en el ministerio antes de buscar aspiraciones presidenciales.
Y parece que aunque ya venían los roces entre Amador y Chaves, “la ruptura del amor político” fue evidente el 14 de febrero, durante una conferencia de prensa donde en vivo se vio a un Chaves en un incómodo intercambio de palabras con el ministro.
En esa conferencia Luis Amador trataba de justificar el problema del caos vial en la falta de inspectores de Tránsito, en que en los últimos seis años Recursos Humanos del MOPT tenía un concurso de nombrar más plazas que no se había realizado a esa fecha.
“Seis años, ya el director chao, el subdirector chao y estamos a punto de nombrar, porque diay la cosa no caminaba” explicaba Amador, cuando fue interrumpido por el presidente que le alegó “seis años de los cuales dos son suyos ministro, ¿por qué se ha atrasado dos años?”.
Aquí Amador tiró una risa de burla, intentó explicar… “se ha atrasado dos años…” y fue nuevamente interrumpido por el presidente, “perdón, perdón, es que ese número yo no me lo sabía”.
Ya para estas fechas, Rodrigo Chaves estaba enterado de las reuniones del ministro Amador, con dirigentes del Partido Unidad Social Cristiana, buscando un partido para ser candidato en el 2026.
Según información recabada por EL MUNDO, estas reuniones y las intenciones desmedidas de Luis Amador fueron el detonante de la ruptura de relación entre ambos. y la posterior destitución el 12 de marzo del 2024, utilizando como fundamento, una licitación otorgada a MECO de una reparación de la pista del Aeropuerto Daniel Oduber en Liberia.
Y es que la carrera política de Amador empezó a precipitarse cuando el ministro decidió buscar por si solo una alternativa electoral, algo que en Casa Presidencial se tomó como una evidente deslealtad hacia Rodrigo Chaves.
Al ser destituido Amador, se hizo público que había tenido algunos encuentros con dirigentes del PUSC, buscando ser su candidato en el 2026. Pero ya al ser exministro, el mismo Amador buscó afiliarse al partido Unidad, mientras por otro lado buscaba crear un nuevo partido de la mano de la exministra de Salud, Joselyn Chacón, que era parte de su fugaz equipo de campaña.
Aquí surgieron roces entre Amador y Chacón, ya que esta última era de la idea de crear una nueva estructura política y por su parte Amador más bien buscaba pegarse a la seguridad financiera que representaba el PUSC.
Esta decisión de Amador de acercarse al Partido Unidad Social Cristiana, para muchos no tenía lógica, porque esta organización política es uno de los partidos más cuestionados por las bases del chavismo, enemigas a ultranza del bipartidismo.
Amador no contaba con el fuerte rechazo a sus pretensiones de un sector del partido Unidad, que finalmente lo dejarían sin esa opción, a la que renunció un día después de que 30 asambleístas nacionales, de esa agrupación política, pidieron no aceptar la posible precandidatura de Amador.
En las últimas semanas Amador se movió con otros grupos buscando apoyos, manejó una agenda de reuniones en el país que coincidía con su venida a Costa Rica para comparecer ante la Fiscalía General, por el caso del Daniel Oduber.
Y ya lo último que puso prácticamente punto final a la carrera política de Amador, fue la divulgación de audios donde se escucha al exministro tejiendo planes de desestabilizar al gobierno, de tomar y dejar el Partido Unidad Social Cristiana, e incluso de buscar apoyo en la Asamblea Legislativa para destituir a Rodrigo Chaves por supuestas enfermedades mentales.
Este último episodio en la “carrera política” de Luis Amador Jiménez parece ser la despedida de un hombre que se veía como el sustituto natural de Rodrigo Chaves.
