San José, 14 may (elmundo.cr) – El presidente de la Asamblea Legislativa, Rodrigo Arias Sánchez, participó este miércoles en el Foro de Alto Nivel sobre Libertad de Expresión, organizado por el Consejo Directivo de la Asociación Internacional de Radiodifusión (AIR) y la Cámara Nacional de Radiodifusión (CANARA).
En el discurso del cierre, Arias, afirmó que “la defensa de la libertad de expresión —pilar insustituible de toda democracia auténtica—, exige hoy más que nunca nuestra atención vigilante y nuestro compromiso compartido”.
“Costa Rica no tiene ejército, pero tiene palabra. No tiene misiles, pero sí micrófonos abiertos. No tiene tanques, pero sí tribunales independientes. En este pequeño país del centro del continente, hemos aprendido que defender la libertad de expresión y prensa es defender también la libertad política, la justicia social y el alma misma de la democracia. Sin embargo, mientras nos honramos con ese lema generoso, no podemos ignorar que la libertad de prensa en nuestra región, y también en nuestro país, enfrenta peligros concretos y urgentes”, añadió el diputado.
“El populismo autoritario ha aprendido a disfrazarse de mayoría, a presentarse como voluntad popular mientras arrasa con los contrapesos y silencia las voces críticas. Su estrategia es conocida: primero se apoya en los medios afines para amplificar su relato, luego busca doblegar a los que le incomodan. Si estos no ceden, los persigue, los desacredita y los asfixia”, expresó.
Por otro lado, Arias manifestó que “la prensa libre puede ser incómoda, pero es indispensable. Sin ella, la democracia no respira; apenas sobrevive. Por ello, resulta inaceptable que se utilicen mecanismos como el otorgamiento de licencias o el uso del espectro radioeléctrico para premiar la sumisión o castigar la disidencia”.
“Por eso, la defensa de la libertad de expresión debe ser firme, coherente y sin concesiones. Porque quien hoy calla ante el atropello a un medio con el que no simpatiza, mañana no tendrá quien lo defienda cuando el silencio se imponga por decreto. La reciente reunión de medio año de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) confirma que estas no son exageraciones”, aseguró.
Además, Arias lamentó que “Costa Rica ha sido clasificada como un país con restricciones relevantes a la libertad de expresión. Este tipo de clasificaciones duelen. Pero más duele la indiferencia con la que a veces se reciben. La prensa libre no necesita halagos: necesita garantías. Cuando estas se erosionan, lo que está en juego no es la dignidad de un medio, sino el derecho del ciudadano a estar informado.
En esta lucha, las instituciones tienen un papel insustituible. Y la Asamblea Legislativa, como primer poder del Estado, tiene el deber de actuar como garante de esos derechos”.
“Porque mientras existan periodistas valientes, medios comprometidos e instituciones firmes, ninguna oscuridad logrará sofocar del todo la verdad”, concluyó Arias.