San José, 18 jul (elmundo.cr) – Cada año, cientos de personas realizan la tradicional Romería hacia Cartago, la cual, más allá de un evento de congregación religiosa, se convierte en un desafío físico para quienes emprenden la travesía.
Implementar una serie de técnicas, tanto antes como durante el recorrido, es vital para culminar con éxito la caminata y evitar diversas afectaciones a la salud.
Por esta razón, el Colegio de Profesionales en Nutrición (CPN), hace un llamado a quienes se disponen a realizar la Romería, para que tomen en consideración las recomendaciones de expertos y no pongan en riesgo su bienestar.
La Dra. Gabriela Traña, vocera del CPN y quien, además, dispone de una amplia trayectoria como atleta, brinda a la población las siguientes recomendaciones:
- Inicie desde días previos con caminatas cortas, para acondicionar su cuerpo al esfuerzo que implica la romería. Por ejemplo, si su recorrido será de 20 km, inicie con 5 km día por medio. La siguiente semana suba a 7 km y luego a 10 km. Esto es importante realizarlo de 2 a 3 veces por semana.
- Durante las prácticas de caminata, pruebe el calzado. De preferencia use tenis confortables, así como ropa deportiva fresca. Procure elegir la indumentaria que le haga sentirse con mayor comodidad, considerando la zona por donde deberá caminar y el estado del clima. Utilice un maletín liviano, donde pueda llevar lo necesario y un peso tolerable para usted.
- Planifique los alimentos que llevará durante la caminata y pruébelos en los entrenamientos previos.
- Si la distancia a recorrer en su caminata es de varios días, planifique los lugares donde deberá descansar, la cantidad de horas a caminar cada día, así como las meriendas y tiempos de comida a realizar durante el recorrido.
- En las caminatas cortas o de un solo día, salga desayunado (a) de su casa. Se recomienda llevar: agua, agua de pipa, agua con electrolitos y bebidas hidratantes; además, frutas, barritas energéticas, algún emparedado de atún, pollo o jamón y queso, pancake o galleta de avena, todo esto, según su preferencia y tolerancia alimentaria.
- Las frutas para consumir en las caminatas deberán ser previamente lavadas y empacadas de manera que no se contaminen con otros productos. Es importante que conserven sus características, en cuanto al color, sabor y textura, para un consumo adecuado y seguro.
- Si va a realizar la Romería corriendo o en bicicleta, es importante que calcule el tiempo que tardará en el recorrido, para planificar la hidratación y el consumo de productos energéticos (gomitas, geles o barritas), los cuales, se recomienda consumir cada 30 minutos.
- Para la alimentación previa y posterior a la romería, se recomienda consumir carbohidratos de fácil digestión (arroz, pasta, papa asada o puré de verdura harinosa), con carnes blancas como pollo, pescado o atún, y vegetales de fácil digestión, buena tolerancia y de su preferencia.
“La romería es una actividad que demanda gran esfuerzo físico, por lo que no debe tomarse a la ligera y mucho menos, realizarse sin una correcta preparación. La alimentación antes, durante y después, juega un rol fundamental, ya que nos permitirá tener las energías necesarias para culminar con éxito la travesía. Esto, junto a una adecuada preparación física y el uso de indumentaria adecuada, nos ayudará a que la caminata no se convierta en un causante de afectaciones a nuestra salud. Es clave, además, que conozcamos nuestro cuerpo y que nos preparemos en función de nuestras fortalezas y debilidades, para no exigir nuestro organismo y procurar cuidar nuestra salud, durante todo el trayecto”, explica la Dra. Gabriela Traña, vocera del CPN.
La experta recuerda, también, la importancia del uso de bloqueador, sombrilla, capa, short o pantalón, gorra y ropa de cambio liviana, según el horario que se haya elegido para hacer la Romería.
El Colegio de Profesionales en Nutrición, hace un llamado para que, en todo momento, los romeros cuiden su salud y, en ese sentido, recuerdan que, si se padece alguna enfermedad con requerimiento de uso de medicamentos, se debe consultar al médico, sobre el protocolo a seguir antes, durante o después de la Romería.
