En Costa Rica tenemos muchos desaciertos de otros, que hay que corregir para ayer.
No hubo diálogo para incurrir en desaciertos y ahora resulta que sí hay que hacer diálogo y tender puentes para corregir los desaciertos de otros.
El diálogo y los puentes deben empezar por reconocer sus errores y cooperar, los que han cometido los desaciertos.
Hay que arreglar lo que hay que arreglar: No pueden seguir existiendo repúblicas independientes. El FEES debe regularse porque la prioridad debe ser la enseñanza pública primaria y secundaria. No puede seguirse mal interpretando el artículo de la Constitución relativo a las convenciones colectivas. No pueden existir las pensiones de lujo. El TSE debe tener como prioridad mejorar y actualizar todo lo relativo a nuestras elecciones periódicas nacionales y municipales. La Sala IV debe tener como prioridad actualizar la correcta interpretación de nuestra Constitución y las leyes. En fin, y así sucesivamente otra gran cantidad de desaciertos.
Los costarricenses queremos seguir disfrutando nuestra democracia a la tica, nuestra democracia del pura vida.
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