La RAE define negociación así: “Tratos dirigidos a la conclusión de un convenio o pacto, arte de negociar”. Desde que inició la cuenta regresiva para la Administración Chaves Robles el pasado 8 de mayo, hicimos énfasis en la necesaria herramienta para el buen desarrollo de las acciones de gobierno; “capacidad de negociación”.
Si bien es cierto el actual mandatario, con su personalidad que lo caracteriza desde que volvió a pisar suelo costarricense, ha mantenido un estilo fiel a lo presentado en su campaña electoral. Una imagen fuerte, agresiva, confrontativo y con autoridad; muy distante de aquellos que pretenden verlo como un individuo antagonista, hostil o arrogante.
El seguimiento a la gestión del presidente de la República viene de dos partes. Un sector que lo “vigila” responsablemente, con argumentos amparados en la experiencia y conocimiento del quehacer en la administración pública. Este grupo, espera que los derechos y responsabilidades constitucionales del ciudadano continúen respetándose a cabalidad, con el objetivo de evitar que el “populismo y el autoritarismo” lleguen a posicionarse en las entrañas del país.
Costa Rica nunca permitirá que su Estado Social de Derecho sea golpeado, siempre luchará para fortalecerlo con el respeto a la institucionalidad y al equilibrio de poderes que nos distingue, garantizando así la existencia de nuestra amada democracia.
Por otro lado, está el grupo de intolerancia subjetiva, que, pareciera, tiene como fin único, aprovechando los errores y contradicciones del gobierno, evitar que los temas verdaderamente importantes para el país lleguen a convertirse en realidad. El mismo presidente Chaves ha reconocido que se equivocó, por ejemplo, prometer al votante que los Concejos de Gobierno serían transmitido en vivo. Bien que mal, ese pequeño pero importante acto de “humildad”, demuestra que la pronta y urgente necesidad de rectificación ya se está evidenciando en el accionar del gobierno.
Samuel Johnson escribió: “Las negociaciones suelen ir mejor cuando existe la confianza. Es muy difícil negociar cuando ambas partes desconfían”. Y la Biblia, en Jeremías 17: 5 se lee: “Así dice el SEÑOR: Maldito el hombre que en el hombre confía, y hace de la carne su fortaleza, y del SEÑOR se aparta su corazón”. No hay duda, hoy más que nunca debemos de reconocer que el único que no falla es Dios y que SU guía es la principal herramienta en nuestras vidas.
Otro claro ejemplo de la “posición conciliadora” que están presentando las autoridades de gobierno, fue la que mencionamos la semana anterior referente al proceso de negociación para la aprobación del proyecto de ley de los Eurobonos. Definitivamente el gobierno escuchó y flexibilizó su postura, muestra de ello se refleja en los cambios en la redacción del texto, y en el monto mismo aprobado por el Plenario.
Esta semana la Escuela de Sociología de la Universidad Nacional (UNA) en conferencia de prensa presentó el informe: “Costa Rica en una encrucijada: Entre esfuerzos del Gobierno, logros, contradicciones y limitaciones”. Los medios de comunicación divulgaron parte del contenido. Por ejemplo, en nota publicada el pasado 8 de diciembre del presente en elmundo.cr, en uno de sus párrafos se indica: “Como parte del análisis hacen hincapié en el «nuevo estilo renovado del mandatario Rodrigo Chaves Robles, donde pasó de un estilo más fuerte con el cual enfrentaba de forma directa a diferentes fuerzas políticas y a la prensa, y ahora se ha observado un estilo en donde a pesar de mantener su vitalidad, está usando mecanismos de negociación con los partidos de oposición y otras fuerzas políticas y hasta cediendo, relativamente, en algunos temas»”.
Desde este espacio siempre promovemos la sana y positiva crítica constructiva, como claro ejemplo de un control político ciudadano que debemos “explotar” con responsabilidad, sin caer en el eterno “cacareo politiquero del garrote por garrotear”.
Es evidente que Costa Rica, en este proceso postpandemia, está experimentando una reactivación económica “natural”, debido al inevitable proceso de apertura y retorno a la “normalidad”. Los ingresos de la hacienda pública están aumentando poco a poco, provenientes del impuesto de la renta y del IVA. También los recursos que genera el turismo y otras actividades están dinamizando aún más la economía. Un punto importante para analizar con toda calma y “sana expectativa”, es la estabilidad en el precio del dólar. Nuestra moneda está hoy más fuerte que hace un año, según datos del BCCR. Claro está que la vulnerabilidad en el tipo de cambio siempre está latente.
Sin embargo, la reciente acción del presidente Chaves de suspender a 5 miembros de la Junta Directiva de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), debe de ser vista y comprendida dentro de la legalidad, y mantener el respeto del debido proceso, no hacerlo, podría crearse un conflicto innecesario que perjudicaría la seguridad y estabilidad social del país. ¿Cómo se vislumbra el 2023? ¿Habrá posibilidad de mantener un ambiente de cordura y “capacidad de negociación” en próximas decisiones del Ejecutivo? De lo anterior, y más hablaremos la próxima semana, Dios primero.
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Sobre el autor:
El autor es Licenciado en Relaciones Internacionales. Asesor Legislativo, analista político internacional. Además elabora procesos de capacitación política, desarrollo comunal y administración. maumazu208@gmail.com.
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