El Partido Liberación Nacional (PLN) enfrenta una encrucijada tras perder tres elecciones consecutivas, lo que lo ha dejado en una situación crítica. Ahora se debate si su próximo candidato presidencial debe ser escogido en una convención cerrada, limitada a dirigentes, o en una convención abierta, donde cualquier ciudadano, simpatizante o no, pueda participar. Esta decisión es crucial para su futuro y su conexión con el electorado.
La importancia de la convención abierta
Históricamente, el PLN ha celebrado convenciones abiertas para elegir a sus candidatos, permitiendo la participación de todos los ciudadanos. Este proceso ha fortalecido el vínculo con el electorado, manteniendo la transparencia y evitando la percepción de control por pequeños grupos de interés dentro del partido. En un contexto de creciente desafección política, esta apertura es esencial para revitalizar la imagen del PLN y reconectar con la ciudadanía.
El riesgo de una convención cerrada
Por otro lado, algunos proponen una convención cerrada, limitada a dirigentes internos. Se argumenta que un proceso más restringido evitaría la influencia externa en el partido. Sin embargo, esto podría percibirse como un paso hacia el elitismo, donde un grupo reducido controla la elección. Además, una convención cerrada podría alimentar la percepción de acuerdos entre cúpulas, algo que el electorado rechaza. En lugar de fortalecer al partido, podría profundizar la desconfianza y fracturar su base.
La oportunidad de la transparencia
La transparencia no es opcional, sino una obligación frente a un electorado que exige procesos abiertos y participativos. Una convención cerrada enviaría el mensaje equivocado de que el partido se cierra en lugar de renovarse. En cambio, una convención abierta representa una oportunidad para que el PLN reafirme su compromiso con la democracia interna y los valores que lo han caracterizado. Al permitir que los costarricenses decidan sin restricciones, el partido no solo elegiría a su próximo candidato, sino que daría un paso firme hacia su regeneración política.
La necesidad de abrirse
El PLN se encuentra en un punto crucial de su historia. La decisión entre una convención cerrada o abierta no es técnica, sino una prueba de su voluntad de renovación. En un momento donde la política está más escrutada que nunca, optar por la transparencia y la participación abierta es fundamental para garantizar el futuro del partido y su relevancia en la política costarricense. Una convención cerrada limitaría la voz del pueblo y alimentaría la desconfianza, mientras que una abierta permitiría al PLN recuperar la conexión con su electorado y caminar hacia un futuro más inclusivo y democrático.
