Lo que hemos vivido estos días en las calles, debe llevarnos a una breve reflexión que quiero compartirles respetuosamente.
Esta fotografía adjunta captada al finalizar la tarde del viernes 28 de junio tras las manifestaciones estudiantiles, debe llevarnos a reflexionar sobre el pensar del pueblo.
El pueblo antojadizamente no manifiesta su sentir en las calles sobre las políticas públicas, lo hace porque es él quien las percibe y las vive de una u otra forma, quien las sufre, las recibe y yo estoy seguro de que muchos educadores y estudiantes y otros sectores sociales necesitan de apoyo, no podemos ser mezquinos.
Desde siempre, desde un inicio, cuando se difiere y se pide ser escuchados, debemos escuchar… Quien ejerce cargos públicos y enmudece ante el sentir del pueblo, solo contribuye a separarnos unos a otros y eso, redundará en una afectación social como la que hemos vivido estos días.
Es fundamental el diálogo permanente como una herramienta esencial para la paz social, esto sin desmeritar derechos constitucionales esenciales como el Derecho de Manifestación, que fortalece nuestra democracia. Ah, y si debe corregirse en algo, debe hacerse con la absoluta transparencia, firmeza y honestidad que merece cada persona, que merecemos los pobladores de nuestra amada Costa Rica.
Hago una llamada a la paz social sin desmeritar los derechos que nos asisten y más cuando hay sectores que necesitan de un apoyo real para seguir adelante, para crecer, para fomentarse. Cuando el pueblo habla, debe ser escuchado.
Lección de vida para todos.
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