El Gobierno no es solo el Ministerio de Obras Públicas

Labores se harán con paso regulado, se deberá utilizar ruta alterna. Cortesía MOPT

Pasan las semanas, los meses y los años y necesitamos por fin, eficiencia en los 3 poderes de la República. Para eso son las elecciones y los cambios de gobierno, de lo contrario, el abstencionismo va a seguir perjudicando a nuestra democracia. Nuestra democracia a la tica. Nuestra democracia del pura vida. ¿Por qué es tan difícil disfrutar de la existencia de un buen ejemplo de un buen gobierno de turno? Con casi dos años concluidos y, si por la víspera se saca el día, no pareciera que vaya a suceder la Tercera República en este nuevo gobierno de turno, ni que vayamos a ser la Singapur de Occidente. Fue un éxito la Segunda República. Tanto así que nos ha sobrevivido hasta la fecha, a pesar de todas las deficientes, mal redactadas y peor interpretadas leyes que han creado los siguientes gobiernos de turno desde esa época.

Pero de todas formas, desde el exterior, instituciones como el FMI, la OCDE, la CEPAL y otras muchas instituciones, periódicamente le indican a nuestro país todas las cosas en que se puede mejorar. Hay análisis, estadísticas y comparaciones con nuestra historia y con otros países, en la mayoría de actividades económicas y sociales existentes. Y desde el interior, desde nuestra realidad diaria, no se ha resuelto todavía el caso cochinilla, el caso diamante, la trocha, eliminar las pensiones de lujo, las repúblicas independientes, el salario escolar, los abusos y privilegios salariales de las convenciones colectivas, evaluar y corregir el FEES, las listas de espera de la CCSS y de expedientes sin resolver en el Poder Judicial, etc, etc, etc.

Lástima que se vea tan difícil alcanzar una Tercera República, igual o más exitosa que la Segunda. Se ve más probable que se lleguen a destruir todos los logros ya obtenidos y dejar de obtener muchos otros y mejores objetivos que aún podrían conseguirse. Después dicen que somos resultadistas, pero es que sí se puede hacer bien las cosas, sí se puede tener un buen ejemplo de un buen gobierno. Se han creado otro montón de instituciones públicas desde la Segunda República, pero lo que más conocemos de ellas es que la mayoría de sus enormes presupuestos se van en privilegios salariales, honorarios, propaganda, papelería, en fin, mucho ruido y pocas nueces. Se han creado instituciones y más instituciones para la atención de las mujeres, pero continúa en aumento su agresión y muerte. No parece que se haya resuelto ni se vaya a resolver nada. Se creó hasta la tal Defensoría de los Habitantes, pero aún no sabemos de qué nos ha defendido o de qué y cuándo nos va a defender. Un montón de instituciones que solo opinan, hacen sugerencias y recomendaciones que nadie hace caso.

Hay hasta un artículo de la Constitución Política para dar hasta un 8% del PIB a toda la educación pública. Pero se inventó el FEES para dejarle solo migajas a lo más importante, que es la educación pública primaria y secundaria. Ya hasta se habla de generaciones perdidas del futuro de la Patria. Y en el artículo de la Constitución ni siquiera se menciona al FEES. Desde la Segunda República se han creado impuestos y más impuestos, se han aprobado préstamos y más préstamos, que ya hasta la enorme y creciente deuda pública es inmanejable y ya es hasta impagable y ni qué decir de la enormidad de los intereses. Ya hasta existen repúblicas independientes: el Poder Judicial, las universidades públicas, las municipalidades y hasta otras instituciones públicas, sólo porque a ningún gobierno de turno, ni le preocupa, ni hace nada útil por controlar el gasto público.

Está fácil. Sólo hay que desarrollar los temas de reactivación económica, que estamos esperando provengan del nuevo gobierno. Para eso es un nuevo gobierno. Pero no es con las ventas imposibles del BCR ni de una parte del INS. Es muy difícil encontrar inversionistas, interesados en comprar instituciones públicas que tienen sindicatos, sindicalistas, privilegios salariales, convenciones colectivas abusivas, salario escolar, pensiones de lujo, derechos adquiridos, leyes del Estado que las protegen y les aportan fondos, etc. etc. Los bancos y las aseguradoras, como la educación y muchas otras actividades económicas, que eran exclusivas del Estado, hace muchos años que tienen participación del sector privado.

Las soluciones son muy fáciles si todas auditorías internas, contralorías y demás instituciones encargadas de controlar el gasto público por fin entendieran que su trabajo es muy necesario e importantísimo para Costa Rica, aunque sus salarios y privilegios sean pagados por cada institución, su deber inicial y final es para Costa Rica, porque de lo contrario nunca van a alcanzar ni más impuestos ni más préstamos, para cubrir tantas y tantas fugas de los recursos públicos.Y hacia futuro, desde el corto plazo, se resolverían también muchos otros problemas, si el TSE tuviera por fin, entre sus prioridades mejorar todos los procesos electorales, ya que entre otros logros, conseguiría de entrada, al menos disminuir el creciente abstencionismo. Tendríamos también más patriotas costarricenses, mejor preparados, motivados e interesados realmente, en alcanzar una exitosa Tercera República.

Finalmente, se resolverían también muchos otros problemas, si la Sala IV tuviera por fin, entre sus prioridades, actualizar y mejorar la redacción y única interpretación de todos los artículos de la Constitución Política y de las leyes en general. Porque ya se modificó un artículo para permitir la innecesaria reelección presidencial y, está claro que no se justifica una nueva Constitución para Costa Rica. De suerte que ahora con la existencia de las redes sociales, todos los costarricenses podemos participar de este cuarto poder ampliado de las democracias, para que más pronto que tarde, todos los costarricenses tengamos todos los mismos beneficios, de esta democracia del pura vida. El gobierno no es solo hacer más o menos obra pública.

Los artículos de opinión aquí publicados no reflejan necesariamente la posición editorial de EL MUNDO. Cualquier persona interesada en publicar un artículo de opinión en este medio puede hacerlo, enviando el texto con nombre completo, foto en PDF de la cédula de identidad por ambos lados y número de teléfono al correo redaccion@nuevo.elmundo.cr, o elmundocr@gmail.com.

Últimas noticias

Te puede interesar...

Últimas noticias