
Por Sofía Benavides (dpa)
Berlín, 6 mar (dpa) – El turismo homosexual, las vacaciones de lujo y los viajes de salud son algunos de los temas que centrarán la ITB de Berlín, la feria de turismo más grande del mundo, que comienza este miércoles en la capital alemana con la presencia de unos 10.000 expositores de 186 países.
La edición número 52 de la ITB girará además en torno a las políticas para prevenir el fenómeno del “overtourism”, es decir, la saturación de los destinos estivales que en algunos casos puede llevar a la llamada “turismofobia”, explicó hoy en rueda de prensa el presidente de la sociedad de ferias, Christian Göke.
En este contexto, las ciudades de Barcelona, Dubrovnik y Ámsterdam presentarán sus conceptos para evitar este fenónemo.
La feria, en la que también están representados la mayoría de los países latinoamericanos, se prolongará hasta el 11 de marzo, y mientras los primeros tres días estarán reservados para los profesionales del sector, el fin de semana se abrirán las puertas para el público general.
Este año, la región asociada elegida por los organizadores es Mecklemburgo-Pomerania Occidental, en la costa báltica de Alemania.
El acuerdo que después de varios meses de parálisis permitirá formar en Alemania un Gobierno entre los conservadores de la canciller, Angela Merkel, y los socialdemócratas, fue saludado por el sector durante la rueda de prensa inaugural.
“Cuando finalmente asuma el nuevo Gobierno federal se deberán abordar los problemas urgentes de nuestro sector y se deberá trabajar en las soluciones”, dijo Norbert Fiebig, presidente de la Asociación Alemana de Viajes, quien reclamó una estrategia que exceda el turismo nacional.
En ese contexto, pidió mejorar las condiciones para que la industria alemana de turismo sea capaz de competir con la europea y con el mercado internacional. Así, los expositores criticaron las tasas turísticas que se aplican en muchos lugares en Alemania así como los cargos por viajes aéreos y la seguridad en la aviación.
Las cifras del sector indican que dos tercios de los turistas alemanes eligen destinos fuera de su país, lo que representa unos 70 millones de viajes al año. Sin embargo, las reservas para Estados Unidos de cara al próximo verano cayeron un 20 por ciento, pese a que se trata del destino más popular para los alemanes.
Consultado sobre si consideraba que dicha caída respondía al “efecto Trump”, el presidente de la Federación de Turismo de Alemania, Michael Frenzel, respondió que eso era una “especulación”.
“Ha pasado poco más de un año, no creo que los viajeros alemanes que eligen Estados Unidos cambien su destino como consecuencia del presidente. No creo que las políticas de (Donald) Trump se trasladen al sector de servicios”, puntualizó.
En relación a los destinos internacionales más destacados, hubo una especial mención a Turquía y Egipto, que paulatinamente se recuperan después del impacto que supusieron los ataques terroristas sufridos en el pasado.
“Aunque no creo que la gente haya olvidado lo sucedido, sí está esperando volver a disfrutar de los atractivos que estos países tienen para ofrecer”, dijo Frenzel. “Los viajeros han visto que estos ataques pueden ocurrir en casi cualquier país (…) y sin embargo la gente en Alemania y en Europa no está asustada ni intimidada. Eso sería exactamente lo que quieren los terroristas”, agregó.
En 2017, la ITB recibió a un total de 10.000 compañías y organizaciones provenientes de 184 países que exhibieron sus productos y servicios a unos 169.000 visitantes, la mayoría de ellos profesionales del sector.