Estrasburgo, 12 jun (elmundo.cr) – El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) condenó este jueves a Francia por haber sentenciado a once activistas pro-Palestina por efectuar campañas de boicot a productos israelíes en supermercados.
El TEDH dictaminó por unanimidad que una condena penal infligida en Francia en 2015 contra los manifestantes pro Palestina no tenía bases legales suficientes y violaba la libertad de expresión. La campaña de boicot a los productos israelíes “es una expresión política y militante que toca un asunto de interés público (…) Criticar a Israel y pedir un boicot a sus productos no es antisemitismo, sino libertad de expresión”. En su sentencia, los jueces europeos concluyen que la condena a los activistas “no se basó en motivos pertinentes y suficientes, y no están convencidos de que se aplicaran los principios del artículo 10 del Convenio Europeo de Derechos Humanos, que protege la libertad de expresión”.
Las personas que formaban parte del movimiento de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS), fueron sentenciadas por incitar al racismo y al antisemitismo cuando distribuían folletos fuera de un supermercado solicitando boicotear los productos israelíes. La sentencia fue confirmada posteriormente por el Tribunal de Casación en el 2015.
El TEDH, que fue requerido en 2016 por los miembros del “Colectivo Palestino 68”, en su pronunciamiento la Corte declara que “por naturaleza, el discurso político es a menudo virulento y una fuente de controversia. Sin embargo, sigue siendo de interés público, a menos que degenere en una exhortación a la violencia, el odio o la intolerancia”. El Tribunal condenó a París a pagar a cada uno de los solicitantes 380 euros por daños materiales, 7,000 euros por daños morales y colectivamente 20,000 euros por los costos y gastos del juicio”.
La condena se da justo cuando se están materializando los planes del nuevo gobierno de Benjamin Netanyahu y Benny Gantz para anexar parte de Cisjordania, territorio palestino ocupado ilegalmente por Israel que continúa sus miras expansionistas en la región.
La anexión de aproximadamente el 30% de la Cisjordania está prevista en el plan de paz para el Medio Oriente promovido por la administración estadounidense de Donald Trump, que también contempla la creación de un estado palestino; a cambio de condiciones onerosas como la renuncia al derecho de retornar para los refugiados y la renuncia al derecho de tener a Jerusalén Este como capital de la nación. Un proyecto rechazado por los palestinos que en los últimos días han presentado una contrapropuesta al Cuarteto para el Medio Oriente (Estados Unidos, Unión Europea, Rusia y la ONU) para la creación de un estado palestino independiente y desmilitarizado.
“En un momento en que los ciudadanos europeos, inspirados por el levantamiento de Black Lives Matter en los Estados Unidos, están desafiando la vergonzosa herencia del colonialismo europeo, Francia, Alemania y otros países de la UE deben poner fin a la represión racista contra los defensores de los Derechos Humanos y solicitar el fin del apartheid israelí”, dijo la activista de BDS, Rita Ahmad, quien también acusó a Europa de ser “profundamente cómplice de la ocupación israelí, el asedio de Gaza y la lenta limpieza étnica de los palestinos en Jerusalén, en el valle del Jordán y en otros lugares (..) Mientras continúe esta complicidad, las campañas de boicot continuarán”, prometió.
La Federación Internacional y la Liga de Derechos Humanos indicaron en un comunicado que el fallo supone que “la crítica a las autoridades israelíes y el uso de medios pacíficos para oponerse a su política no se puede confundir con un acto de antisemitismo”. Amnistía Internacional también se congratuló por una sentencia que “debería impedir la utilización abusiva de las leyes contra las discriminaciones para atacar a militantes que hacen campaña contra atentados a los derechos humanos cometidos por Israel contra los palestinos”.