Dortmund (Alemania), 26 jun (dpa) – A tres meses de las elecciones generales de Alemania, el candidato del Partido Socialdemócrata del país (SPD), Martin Schulz, atacó este domingo con inusitada virulencia a su principal rival de cara a la gran cita con las urnas, la canciller Angela Merkel, calificándola de “ataque a la democracia”.
Durante el Congreso del SPD celebrado en Dortmund en el que la formación aprobó su programa electoral de cara a los comicios del próximo 24 de septiembre, quien fuera presidente del Parlamento Europeo acusó a la Unión Cristianodemócrata (CDU) que dirige la mandataria de eludir mensajes con contenido que permitan un verdadero debate democrático.
“Yo a eso lo llamo un ataque a la democracia”, declaró el aspirante socialdemócrata a conquistar la cancillería federal para a continuación referirse a la “arrogancia del poder” de la CDU, un partido que, en su opinión, es poco claro en relación a su postura con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Las últimas encuestas arrojan una clara ventaja de la formación conservadora que dirige Merkel, que, a tres meses de la cita electoral, consigue sacar una diferencia de hasta 16 puntos porcentuales al SPD, actual socio menor en la coalición de Gobierno.
En el Congreso extraordinario celebrado este domingo en Dortmund, los cerca de 600 delegados socialdemócratas dieron el visto bueno por unanimidad a un programa electoral en el que abogan por un alivio fiscal para contribuyentes con ingresos bajos y medios y por mayores impuestos para las rentas más altas. Además, defienden que los jardines de infancia sean gratuitos y apuestan por la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo.
De hecho, Martin Schulz fijó el matrimonio homosexual como condición sine qua non para renovar una más que posible coalición de Gobierno con Angela Merkel.
Los socialdemócratas marcan así distancias con la CDU de la mandataria, formación defensora a ultranza de la familia tradicional, que desde hace años, pese a diversos intentos de la oposición, se resiste a aprobarlo.
Pero el discurso combativo del candidato del SPD no tuvo este domingo únicamente a Merkel como blanco de todas las críticas. Schulz también arremetió con dureza contra el partido ultraderechista y de tintes xenófobos Alternativa para Alemania (AfD), a quien calificó de formación “neonazi light”.
Los nueve minutos de aplausos cosechados le sirvieron a Schulz para reconciliarse con los suyos tras encadenar este año tres derrotas consecutivas en elecciones regionales y caer de forma drástica en las encuestas tan solo unas semanas después de generar ilusión al ser nombrado oficialmente rival de Merkel.
“Aún no está nada decidido. Todavía tenemos tiempo por delante para darle la vuelta a la situación”, señaló el ex canciller germano, Gerhard Schröder, quien tras siete años en el poder perdió en 2005 las elecciones ante una política de poco renombre internacional por aquel entonces llamada Angela Merkel.
“¡Venceremos!”, gritó en español el ex mandatario para animar a sus correligionarios a revertir la situación que coloca al SPD a más de 15 puntos porcentuales de su inmediato rival la CDU.
Las ovaciones con las que los delegados y los miles de simpatizantes agasajaron a Schulz contrastaron con los mensajes que al término del congreso llegaron desde las filas del partido de la canciller.
“La desesperación no debe ser tan grande nunca como para que entre demócratas nos acusemos de ataque a la democracia”, tuiteó el secretario general de la CDU, Peter Tauber.
“Los ataques personales contra la canciller no dan resultado y muestran la gran desorientación que afecta ahora al SPD”, declaró al diario “Passauer Neuen Presse” por su parte el secretario general del ala bávara de la formación conservadora de Merkel, Andreas Scheuer.