Ginebra, 9 abr (elmundo.cr) – Varios países europeos están considerando mezclar las vacunas COVID-19 para los ciudadanos que recibieron una primera dosis de AstraZeneca, a lo que la Organización Mundial de la Salud ha respondido este viernes diciendo que no hay suficientes datos para tomar esa decisión.
“El grupo de expertos de inmunización designado por la OMS (SAGE) dio recomendaciones sobre el uso de AstraZeneca en febrero, y una de las cosas que estudiaron fue si se podía combinar. Ellos determinaron que no había datos adecuados para determinar si esto puede hacerse, por lo que ahora mismo no recomiendan intercambiar vacunas”, dijo la portavoz de la Organización, Margaret Harris, ante periodistas en Ginebra.
El doctor Rogerio Pinto de Sá Gaspar, director de regulación y precalificación de medicamentos, reiteró más tarde durante la conferencia de prensa bisemanal de la agencia de la ONU que no hay datos suficientes.
“Quiero ser muy claro con esto, no tenemos datos disponibles ahora mismo, y esa es la única respuesta que podemos dar por ahora” expresó.
Los científicos de SAGE recomendaron en febrero en su guía interina sobre AstraZeneca, “que se utilice el mismo producto para ambas dosis”.
Los coágulos de sangre son muy raros
A principios de esta semana, la Agencia Europea del Medicamento y la Agencia de Medicamentos y otros Productos Sanitarios del Reino Unido dijeron que los coágulos de sangre con niveles bajos de plaquetas deben incluirse como efectos secundarios muy raros de la vacuna de AstraZeneca.
El subcomité COVID-19 del Comité Asesor Mundial sobre Seguridad de las Vacunas de la OMS ha revisado la información disponible de Europa y otras regiones y ha dicho que es plausible una relación causal entre la vacuna y la aparición de coágulos sanguíneos con plaquetas bajas, pero se requiere más investigación.
La Organización Mundial de la Salud, la Agencia Europea del Medicamento y la Agencia Reguladora de Medicamentos y Productos Sanitarios continúan asegurando que los beneficios de la vacuna superan el riesgo de estos efectos secundarios muy raros.
“Todas las vacunas y medicamentos conllevan un riesgo de efectos secundarios. En este caso, los riesgos de enfermedad grave y muerte por COVID-19 son muchas veces más altos que los riesgos muy pequeños relacionados con la vacuna”, expresó el director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Gebreyesus.
Las vacunas no disminuyen la transmisión
La Organización Mundial de la Salud también expresó una grave preocupación por el aumento en casos y muertes por COVID-19 en todas las regiones del mundo.
“Todas están mostrando un aumento, un poco menos en África, pero por todas partes del planeta estamos viendo números muy preocupantes”, dijo Margaret Harris.
La experta dijo que esto se debe a una combinación de varios factores, entre ellas, un aumento en las variantes, y personas que salen del confinamiento y lo interpretan como una señal de volver a la “antigua normalidad”.
“Ya sabemos que esto no está funcionando. Las personas también están malinterpretando las cosas y pensando que las vacunas van a detener la transmisión y no es así. Necesitamos reducir la transmisión mientras le damos la oportunidad a las inmunizaciones de parar la enfermedad grave y las muertes”, agregó.
Harris dijo que, sin embargo, hay buenas noticias de estudios preliminares en países como Reino Unido que han vacunado a una buena parte de su población y que afirman que se han evitado una gran cantidad de muertes y casos graves.
“Tenemos que mantener todas las medidas de salud pública, tenemos que ser mejores en las cuarentenas, en el aislamiento de las personas con síntomas, en el rastreo de contactos, y realmente hacerlo en todas partes”, agregó.
Por otro lado, Pinto informó durante la conferencia que las vacunas chinas Sinopharm y Sinovac están en las etapas finales de evaluación y ya se ha citado a un grupo técnico de expertos para el 26 de abril y la semana del 3 de mayo, en donde se espera que haya una decisión final sobre el uso de emergencia de ambas inmunizaciones.
Un infierno en Brasil
Brasil es uno de los países donde las muertes están aumentando de manera preocupante, afirmaron los expertos de la OMS.
“Brasil está sufriendo pérdidas terribles, pero el mensaje es el mismo, las medidas de salud pública funcionan y hay que aplicarlas. Sabemos que es muy difícil para personas que viven en lugares sobrepoblados, y ellos necesitan apoyo de todos los niveles para evitar las multitudes, y todos los que estén potencialmente infectados deben ser identificados”, dijo Harris.
El director de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Gebreyesus, informó que se encuentran en contacto con el Gobierno Federal del país, y que tuvieron una reunión con el recién elegido Ministro de Salud y otros oficiales, y que espera que esto ayude en la colaboración.
“La situación es muy muy preocupante. Estamos viendo cómo podemos apoyar, pero lo crucial para hacer ahora es tomar las medidas que ya sabemos que funcionan para ralentizar este virus”, afirmó el asesor jefe de Tedros, el doctor Bruce Aylward.
Preguntado sobre si llevar más vacunas a Brasil podría ayudar a detener la emergencia, dada la logística y la disponibilidad de inmunizaciones, Aylward expresó que hacerlo tendría un efecto mínimo en limitar el riesgo de algunas personas.
“Con lo que estamos lidiando aquí es con un infierno violento de enfermedad y eso requiere acciones de la población, sobre identificación, aislamiento y cuarentena, y esto hay que hacerlo para ralentizar el virus. Las vacunas son cruciales para proteger a los trabajadores de salud y las poblaciones de adultos mayores… pero las medidas de salud que ya conocemos se pueden aplicar a nivel masivo”, dijo.
Se necesitan más vacunas
El doctor Tedros alertó este viernes que sigue existiendo un impactante desequilibrio en la distribución mundial de vacunas.
“Se han administrado más de 700 millones de dosis de vacunas en todo el mundo, pero más del 87% se han destinado a países de ingresos altos o medianos altos, mientras que los países de ingresos bajos han recibido solo el 0,2%”, dijo.
En promedio, en los países de ingresos altos, casi una de cada cuatro personas ha recibido una vacuna. En los países de bajos ingresos, es uno de cada 500.
“COVAX esperaba distribuir casi 100 millones de dosis a finales de marzo, pero debido a una marcada reducción en el suministro, solo hemos podido distribuir 38 millones de dosis”, informó.
Tedros dijo que la instalación espera ponerse al día durante abril y mayo, y que se trata de un mecanismo solido que funciona y puede distribuir vacunas de manera más rápida y eficiente que cualquier otro mecanismo.
“El problema es no sacar las vacunas de COVAX; el problema es hacerlas llegar a la instalación. La escasez de suministro está impulsando el nacionalismo y la diplomacia de las vacunas”, recalcó.