“Cuando regresé a la oficina para editar mis fotos, me quedé muy sorprendido al ver que el tirador era en realidad, un hombre que estaba de pie detrás del embajador mientras hablaba. Como un amigo, o un guardaespaldas”, escribió el fotógrafo.

Mevlut Mert Altintas, un policía turco fuera de servicio aprovechó la nula seguridad que tenía el embajador de Rusia para propinarle varios balazos por la espalda, gritando consignas como “Alá es grande” y “Recuerden Aleppo”. Foto: Burhan Ozbilici / AP

Ozbilici fue una de las dos personas que logró capturar las imágenes al momento del atentado contra el diplomático ruso. La segunda persona fue un camarógrafo de la agencia Nederlandse Omroep Stichting (NOS) de los Países Bajos que captaba las declaraciones de Karlov.

El nombre del camarógrafo, que durante el tiroteo alcanzó a abrir el enfoque de su equipo para captar al atacante del embajador, quien ya yacía sin vida en el piso, no ha sido revelado.