Washington, 22 may (dpa) – El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, dijo hoy que deja la OEA “mucho más fuerte” que como la encontró cuando se puso hace diez años al frente de la organización hemisférica.
El Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) se despidió hoy en una sesión protocolar de Insulza, aunque su mandato no concluye oficialmente hasta el próximo lunes.
La transición entre su equipo y el de su sucesor, el uruguayo Luis Almagro, está transcurriendo de modo “tranquilo y democrático”, según Insulza. Almagro, ex canciller de Uruguay, asumirá oficialmente el cargo el próximo martes.
Insulza reiteró la necesidad de que la OEA, a la que muchos acusan de estar todavía anclada en la Guerra Fría y de ser un instrumento de Estados Unidos, se adapte a los desafíos actuales.
“La OEA debe ser una organización inclusiva, de países soberanos, diversos y legitimados por la democracia, que actúan sobre la misma agenda hemisférica, en plena igualdad. Es la exigencia de la OEA del siglo XXI, muy lejana de lo que nos demandaba aquella que nos impuso la Guerra Fría”, dijo el secretario general.
Al hacer balance de su gestión, Insulza señaló que desde que asumió el cargo en 2005 sus ejes de acción fueron: inclusión, democracia, soberanía e igualdad. “Cuatro valores que a veces no coexisten cómodamente. Pero son, querámoslo o no, nuestro desafío y debemos de ser capaces de volcarlos en nuestra agenda hemisférica”, añadió.
El secretario general también aludió a Cuba, que participó por primera vez en abril en la Cumbre de las Américas en Panamá, tras el deshielo diplomático con Estados Unidos.
“Sentimos como propio el regreso de Cuba al Sistema en la Cumbre de Panamá y espero que llegue el momento de un mayor acercamiento”, añadió Insulza, que recordó como el tema fue madurando desde la Cumbre del Mar de Plata de 2005, “cuando nadie hablaba de Cuba”, hasta el levantamiento de las sanciones en la Asamblea de San Pedro de Sula en 2009 y finalmente su participación en Panamá.
Insulza también destacó algunos logros de su gestión: las observaciones electorales, el programa de facilitadores judiciales y la igualdad de género.
El embajador de Chile ante Estados Unidos, Juan Gabriel Valdés, hizo un balance positivo de la gestión de su compatriota.
“Insulza ha permitido y ha facilitado que la OEA siga siendo un actor importante en el hemisferio”, señaló el embajador, quien consideró que, dada la división que existe en la región, “mantener un organismo hemisférico que permita que Estados Unidos y América Latina se encuentren no es un mérito menor”.
“Si ha habido fallas en este periodo, las fallas las adjudico mucho más a la voluntad de los países a desarrollar un organismo que sea realmente efectivo, más que a una conducción que ha permitido que la OEA siga manteniendo un grado de presencia mayor en lo que es el desarrollo del diálogo hemisférico”, añadió Valdés.
Expertos consultados por dpa hicieron un balance negativo de la gestión de Insulza al frente de la OEA. En cambio, el político chileno goza de una gran prestigio en su país, donde su capacidad resolutiva le mereció el sobrenombre de “Panzer”, como el tanque.
Insulza deja la OEA en un momento de baja credibilidad para la organización, que además está inmersa en una crisis de identidad ante el creciente número de organizaciones regionales.
“Será recordado como el secretario general que mancilló la imagen de la OEA por su actitud complaciente y timorata ante la erosión de las instituciones democráticas en varios países de la región”, señaló Juan Carlos Hidalgo, analista del CATO Institute.
Héctor Schamis, profesor de estudios latinoaméricanos de la universidad de Georgetown, consideró que la defensa de los derechos humanos es el mayor fracaso de Insulza, al que acusa de haber sido “cómplice de los abusos del chavismo casi toda la gestión”.
Schamis cree que Insulza debería haber internvenido antes en Venezuela y haber usado la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) “como se debe”.
El político chileno fue elegido secretario general de la OEA en mayo de 2005 y reelegido en marzo de 2012.