Nueva York, 17 jul (elmundo.cr) – Los agricultores familiares necesitan políticas públicas y marcos jurídicos propicios que “les permitan adaptarse y prosperar en el cambiante entorno actual” y maximizar su contribución al desarrollo sostenible, ha asegurado el Director General de la FAO, José Graziano da Silva.
Graziano da Silva participó en el lanzamiento del Decenio de las Naciones Unidas de la Agricultura Familiar, coincidiendo con un Foro Político de Alto Nivel sobre el Desarrollo Sostenible celebrado en Nueva York.
El evento contó con la participación de los responsables de la FAO y del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA), que lideran la implementación del Decenio, así como de representantes de Costa Rica y Francia, La Vía Campesina, el Foro Rural Mundial y la Organización Mundial de Agricultores, entre otros grupos.
“Necesitamos reformar nuestros sistemas alimentarios y vincular las actividades del Decenio de la Agricultura Familiar con el Decenio de Acción sobre la Nutrición. Los campesinos familiares son los que producen alimentos saludables. Pueden salvarnos de la epidemia de obesidad, y los necesitamos para contar con dietas sanas”, explicó Graziano Da Silva.
Sentar las bases para la implementación del Decenio
Las granjas familiares representan más del 90 por ciento de todas las explotaciones agrícolas del planeta y producen el 80 por ciento de los alimentos a nivel mundial en términos de valor.
Recordando que, aunque los agricultores familiares son un grupo muy heterogéneo y no existe un enfoque único para todos, el Director General de la FAO destacó dos medidas comunes clave que ayudarán a allanar el camino hacia la implementación del Decenio: “en primer lugar, la FAO y el FIDA han establecido un fondo fiduciario de múltiples donantes. La FAO ya ha asignado algunos fondos iniciales para promover un mejor diálogo e intercambio entre los agricultores sobre políticas públicas”.
En segundo lugar, instó a los países a progresar en la elaboración de sus Planes de Acción Nacionales, basados en el Plan de Acción Mundial de la FAO y el FIDA lanzado en mayo. “De esta manera, la FAO y el FIDA comprenderán mejor las demandas y los procesos de cada país”, explicó.
Los agricultores familiares como factores clave para una mejor nutrición
Graziano da Silva expresó igualmente su preocupación por los crecientes niveles de malnutrición. “Tenemos que abordar urgentemente – dijo- los alarmantes y crecientes niveles de obesidad y carencias de micronutrientes. Esto ocurre sobre todo en las poblaciones que consumen dietas de mala calidad basadas en productos básicos con poca diversidad alimentaria”.
Citó el alto consumo de alimentos ultraprocesados como otro factor clave de la prevalencia de la obesidad: “los alimentos ultraprocesados, en particular, tienen poco o ningún valor nutritivo, con un alto contenido de grasas saturadas, azúcares refinados, sal y aditivos químicos, pero por desgracia, son más baratos y de más fácil acceso y preparación que los alimentos frescos, sobre todo para la población pobre en las zonas urbanas”.
En este contexto, el responsable de la FAO señaló que los agricultores familiares también podrían desempeñar un papel vital para aumentar la producción y el consumo de alimentos frescos, sanos y diversificados y, por lo tanto, en la mejora de la dieta de las personas.
Alimentar a la población debe ir de la mano con cuidar del planeta
En sus comentarios, Graziano da Silva subrayó además que el mundo ya no puede confiar en el modelo de innovación agrícola que resultó de la Revolución Verde en la década de 1960.
“Los sistemas agrícolas con un uso intensivo de insumos y recursos han incrementado la producción de alimentos con un elevado coste para el medio ambiente, generando deforestación, escasez de agua, agotamiento del suelo y altos niveles de emisiones de gases de efecto invernadero”, advirtió.
El Director General de la FAO hizo un llamamiento a favor de un cambio transformador hacia sistemas alimentarios que produzcan alimentos saludables y nutritivos a la vez que se salvaguardan los recursos naturales. “Alimentar a la gente debe ir de la mano con cuidar del planeta”, concluyó.
El evento paralelo “Lanzamiento del Decenio de las Naciones Unidas de la Agricultura Familiar (2019-2028): sinergias y principales contribuciones a la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible” ofreció la oportunidad de promover un diálogo entre los agricultores familiares, gobiernos, los organismos de las Naciones Unidas y los actores no estatales para movilizar acciones a nivel mundial, regional y nacional con el fin de apoyar la transformación de los sistemas alimentarios y agrícolas para una mejor nutrición.