Tel Aviv, 4 ago (dpa) – El radical judío Meir Ettinger, detenido tras los ataques extremistas registrados la semana pasada, comparecerá hoy ante el juez en Nazareth, para que se prolongue su detención preventiva, según informó la policía.
Ettiger, que encabezaba la lista de los judíos extremistas más buscados del servicio de seguridad interno Shin Bet, tiene 24 años y es nieto del rabino de la ultraderecha Meir Kahane, cuyo movimiento Kaj fue prohibido en 1988 por racista. Dos años más tarde murió por los disparos de un árabe en un hotel de Nueva York.
Meir Ettinger fue detenido a última hora del martes por estar presuntamente involucrado en actividades “nacionalistas criminales”, dijo la portavoz de la policía Luba Samri.
Las tensiones entre palestinos e israelíes se han agudizado desde que unos presuntos extremistas judíos lanzaran una bomba incendiaria a la casa de unos palestinos en Cisjordania y las llamas mataran a un bebé y causaran heridas graves a los padres y el hermano de cuatro años.
En la noche del lunes, una mujer de 27 años israelí resultó herida cuando, al parecer, unos palestinos lanzaron una bomba incendiaria a su coche, que se incendió. La víctima fue trasladada al hospital y sufre quemaduras en un 25 por ciento del cuerpo.
Agresores, presuntamente también palestinos, lanzaron cócteles incendiarios contra cuatro vehículos israelíes en el sur de Jerusalén.
La página de noticias “Y-net” publica un documento en el que Ettinger presuntamente aboga por atacar a los palestinos y vandalizar lugares de especial relevancia para musulmanes y cristianos, a fin de crear una gran “revolución” y acabar con el Estado de Israel.
Ettinger ha sido detenido en numerosas ocasiones y ha tenido que acatar la prohibición que le impide entrar en Cisjordania. Vive en Safed, en el norte de Israel.
Las nuevas medidas aprobadas por el gabinete de seguridad del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu podrían contribuir a que los fiscales tengan más éxito manteniéndolo entre rejas.
Entre otros, el gabinete de seguridad autorizó las órdenes de detención administrativa para extremistas judíos. Este tipo de órdenes sólo se usaban hasta ahora con los milicianos palestinos. La detención administrativa se aplica a personas que presuntamente suponen un riesgo para la seguridad, incluso antes de que hayan cometido delito alguno.
