Karlsruhe (Alemania), 4 ju (dpa) – Por primera vez desde su creación, el Tribunal Constitucional alemán abordó hoy la posibilidad de cortar la financiación estatal a un partido político sospechoso de ser anticonstitucional.
En la audiencias de hoy y de mañana miércoles, el tribunal evalúa si el Partido Nacional Democrático (NPD), que se rebautizó como Heimat en junio, debe seguir recibiendo fondos de los contribuyentes. “Heimat” es la palabra alemana para “Patria”.
El NPD es una agrupación de extrema derecha que ha sido acusada de tener vínculos neonazis. Ha habido varios intentos infructuosos de prohibirla. En el pasado, el grupo ha logrado representación en Parlamentos regionales.
El partido no envió representantes a la audiencia celebrada hoy en la sede del tribunal en Karlsruhe. La agrupación comunicó por fax que no espera un juicio justo, precisó la presidenta del Segundo Senado, la jueza Doris König. La magistrada agregó que como no hay obligación de estar presente, la vista se celebra sin el acusado.
Aún no se ha fijado fecha para el pronunciamiento de la sentencia.
La presidenta del Parlamento alemán, Bärbel Bas, declaró ante el tribunal que el procedimiento es “de gran importancia en términos de política estatal”.
Según sus palabras, no hay forma de explicar a la población que los enemigos de la Constitución son respaldados con dinero de los impuestos. La ministra alemana del Interior, Nancy Faeser, y el presidente de la Cámara Alta o de las Regiones, el alcalde hamburgués Peter Tschentscher, se expresaron de forma similar.
Thomas Haldenwang, jefe de la Oficina de Protección de la Constitución -el servicio de inteligencia interior-, declaró que la agencia ha presentado numerosas pruebas de que el partido sigue siendo anticonstitucional.
Desde 2017, nada ha cambiado en la actitud del partido, confirmó en calidad de experto Steffen Kailitz, del Instituto Hannah Arendt para la Investigación del Totalitarismo. Kailitz afirmó que el partido rechaza fundamentalmente la democracia contemporánea y no oculta su hostilidad hacia la Constitución.
En 2017, el Tribunal Constitucional de Alemania rechazó el pedido de prohibir el NPD, al considerar que no había pruebas de que pudiera aplicar con éxito sus objetivos anticonstitucionales. Sin embargo, declaró que el partido representaba “un concepto político dirigido a la eliminación del orden básico democrático libre existente”.
Tras la sentencia, se aprobó una enmienda a la Constitución alemana, o Ley Fundamental, para excluir a los partidos anticonstitucionales de la financiación de los contribuyentes.
En virtud de esta enmienda, las Cámaras Baja y Alta del Parlamento alemán y el Gobierno federal solicitaron al Tribunal Constitucional que excluyera al NPD de la financiación pública durante seis años.
El objetivo de esta solicitud es impedir que “un partido que desprecia el orden básico democrático libre sea apoyado con dinero de los contribuyentes -independientemente de su cuantía- por el Estado cuyos valores constitucionales esenciales rechaza”.
Según la Ley de Partidos Políticos alemana, los partidos pueden recibir dinero del Estado por su labor. Para ello deben alcanzar unos porcentajes mínimos en las elecciones nacionales, regionales y europeas.
El NPD no ha alcanzado ese mínimo, por lo que no recibió dinero en 2021, indican las últimas cifras del Bundestag (Cámara Baja del Parlamento alemán).
El NPD argumenta que la nueva normativa viola el principio de igualdad de oportunidades para los partidos políticos, que está consagrado en la Ley Fundamental y es un elemento central de la democracia alemana.
El rebautizado partido Heimat anunció en su página web que no permitirá que se lo “convierta en un extra en una simulación judicial”.
