Santiago, 29 oct (elmundo.cr) – La “Marcha por Jesús” convocada en el centro de Santiago por agrupaciones evangélicas fue atacada el pasado sábado, por un centenar de personas encapuchadas con piedras y palos.
La marcha que contaba con autorización de la intendencia conmemoraba el Día Nacional de las Iglesias Evangélicas y Protestantes, y en esta ocasión se planteó como contraria a la “ideología de género”.
A la altura del Centro Cultural Gabriela Mistral, los encapuchados atacaron a los manifestantes con piedras, palos, fuego y bombas de humo, obligándolos a resguardarse en edificios aledaños.
El incidente tuvo por saldo tres lesionados, entre ellos un carabinero herido por una piedra en su cabeza, y 18 detenidos, de los cuales tres pasaron a control de detención.
Entre los afectados se encuentra un grupo de niños de la Fundación Unidad de Ministerios Infantiles de Chile (Umich), quienes se encontraban encabezando la marcha.
Ante esto Carol Espinaza, directora de la fundación, anunció una querella por los perjuicios provocados a los menores, la que será presentada el martes.
“Nos vamos a querellar por los hechos de violencia contra niños y niñas y sus familias; y, además, pondremos a disposición del Ministerio Público todos los antecedentes necesarios para sancionar a quienes resulten responsables”, dijo.
Alan Roldán, director y productor ejecutivo de la manifestación, indicó que hay cuatro personas hospitalizadas por las agresiones.
“No podemos aceptar que gente anarquista venga y no nos dejen hacer nada. Estamos pidiendo una reunión urgente con el ministro Chadwick, porque esto no puede seguir pasando. Era una marcha pacífica, familiar, nunca nos había ocurrido algo así”, agregó.
La intendenta metropolitana, Karla Rubilar, también anunció una querella. “En democracia, las diferencias de ideas o creencias se conversan, no se resuelven atacando a otros”, afirmó.
