Madrid, 23 feb (EFE).- El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, aseguró este viernes que desde que llegó al Gobierno, hace apenas un mes y medio, cada vez que abren “las gavetas” en un ministerio “nos saltan los casos de corrupción”, y agregó que devolver la transparencia a las instituciones conllevará un proceso “gradual y progresivo”.
“Cuando la corrupción entra en un país de manera sistemática llega a todas las instituciones y las corroe, pero no hay que equivocarse con pensar que todos los funcionarios del Estado son igualmente corruptos, muchos vienen a dar información porque se sienten liberados”, puntualizó Arévalo en una entrevista con el presidente de la Agencia EFE, Miguel Ángel Oliver, en la Tribuna EFE-Casa América.
El mandatario puso como ejemplo de la situación actual de Guatemala la destitución del responsable de la Dirección General de Aeronáutica Civil, Francis Argueta, en la que “teníamos una combinación de incompetencia con corrupción”.
“No únicamente había un abandono total de la función de administración efectiva de la seguridad aérea del país y del aeropuerto, sino que además había mecanismos que permitían el funcionamiento con impunidad de ciertas redes y mecanismos mediante las cuales se permitía que no hubieran entradas y salidas vigiladas”, dijo.
Y señaló que en el caso de los puertos y aeropuertos, el alcance de la corrupción es “clarísimo”, pero “hemos encontrado sistemas de corrupción en oficinas públicas en donde el manejo de los fondos de inversión es mínimo, pero hay plazas que son repartidas a los correligionarios o amigos sin que la gente llegue a trabajar”.
Rápida reducción de criminalidad
Una de las principales amenazas contra los guatemaltecos, según Arévalo, es la extorsión, que afecta a la vida de “no solo dueños de negocios de toda talla, sino de gente común que vive en un barrio y tiene una tienda y que terminan pagando impuestos a distintos grupos después de ser amenazados”.
Estos grupos, dijo, son redes que “operan desde las cárceles y desde allí hacen sus amenazas”, y explicó que en la primera semana de su Gobierno se han requisado varios equipos de telecomunicaciones en distintas cárceles del país y aislado a los grupos que se dedicaban a ello.
“Hemos establecido un grupo especial de combate a la extorsión. El Gobierno de Estados Unidos nos facilitó una serie de motocicletas, que ha servido para que tengan una mayor presencia en las zonas afectadas, fundamentalmente en el área metropolitana de la capital”, indicó.
Arévalo señaló que igualmente se está operando contra el narcotráfico, con la incautación de cerca de más de media tonelada de cocaína en el puerto de San José, y además se ha reestructurado en el Ministerio de Gobernación una unidad especial que integra a otras instituciones para organizar “un organismo de combate a los tráficos fronterizos”.
El rescate de la justicia
El presidente de Guatemala negó, por otra parte, la necesidad de una “reconciliación” ideológica en su país, sino más bien de un “rescate” de las instituciones de Justicia “y sus principios” de las manos de “quienes se apropiaron de ellos para violar los principios de la legalidad”.
“Cuando uno habla de reconciliación generalmente está hablando de algún tipo de desavenencia que tiene un fondo político o ideológico, pero la situación en Guatemala no tiene esas características. Se ha tratado de un asalto al poder por bandas político-criminales, que se han apropiado de las instituciones públicas para conducir desde ahí intentos de asalto y meter la mano en fondos públicos, plazas contratos etc..”, remarcó.
Apoyo internacional
El mandatario guatemalteco atribuyó la consolidación de su mandato, a pesar de los impedimentos, a una mezcla entre el apoyo de la comunidad internacional y de la sociedad de Guatemala “cuya determinación fue clave para liberarse del abrazo asfixiante de la corrupción”.
El apoyo de España, que calificó de “fundamental”, se plasmó en el encuentro que mantuvo este viernes con empresarios en Madrid y la víspera con el rey Felipe VI y el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez.
“El Estado va a estar haciendo inversiones muy significativas de infraestructura para el desarrollo en las áreas más necesitadas del país (que corresponden principalmente a aquellas donde viven los pueblos originarios). Necesitamos hacer grandes inversiones, y son oportunidades donde podemos contar con capital privado nacional e internacional. España puede tener la certeza jurídica para trabajar juntos”, concluyó.
Arévalo concluye en Madrid una gira europea durante la que ha participado en la Conferencia de seguridad de Múnich y se ha reunido con las autoridades de Francia y de la Unión Europea, además de visitar organismos internacionales en Suiza, en su primer viaje al exterior desde que asumió la presidencia el 15 de enero. EFE