La Justicia colombiana declaró este lunes 28 de julio al expresidente Álvaro Uribe (2002-2010) responsable de soborno en actuación penal y fraude procesal, dos de los tres cargos por los que fue llevado a juicio. El exmandatario fue absuelto de un tercer cargo de soborno simple.
El juicio más esperado de Colombia llegó a su fin. El fallo contra el expresidente colombiano Álvaro Uribe se conoció este lunes 28 de julio. Durante todo el proceso, hasta su alegato final anunciado el 8 de julio, el exmandatario reiteró ser inocente.
“El primer soborno en actuación penal en cuanto a la materialidad de la conducta punible ha quedado acreditado”, dijo la jueza al evaluar los contactos del abogado Diego Cadena, que representó a Uribe, con el exparamilitar Juan Guillermo Monsalve, preso en una cárcel de Bogotá, para que éste no declarara sobre los supuestos vínculos del expresidente con esos grupos armados ilegales.
Esta es la primera vez que un expresidente colombiano enfrenta un proceso penal. El caso se remonta a 2012. Entonces, el senador Cepeda afirmaba ante el Congreso que sospechaba de la implicación del expresidente en la creación del Bloque Metro de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), un grupo paramilitar responsable de masacres y asesinatos.
Uribe demandó por supuesta manipulación de testigos al senador Cepeda, quien en esa época preparaba una denuncia contra él por presuntos vínculos con el paramilitarismo. Lejos de investigar a Cepeda, la Corte Suprema abrió un proceso contra Uribe por manipulación de testigos.
Uribe renunció en agosto de 2020 a su escaño de senador para dejar de estar aforado y que su caso pasara a la justicia ordinaria.
Con EFE, Reuters y AFP