San José, 19 de marzo (elmundo.cr)- . A Paulo César Wanchope lo que pasó hace siete años no lo afecta hoy.
Escuchó la comparecencia de Jorge Luis Pinto en la audiencia por el juicio donde Keylor Navas, Bryan Ruiz y Celso Broges acusan al expresidente de la Comisión de Selecciones, Adrián Gutiérrez, y al exfederativo Juan Carlos Román por una supuesta difamación, tras decir en el año 2018 que la salida del colombiano, tras el Mundial de Brasil 2014, fue porque los líderes del plantel dijeron que perderían partidos si el técnico continuaba al frente del barco.
Pinto recalcó, otra vez, que cuando él se refirió a que dormía con el enemigo, era única y exclusivamente por Paulo César Wanchope, su asistente de entonces junto con Luis Marín.
“Wanchope le dijo a los federativos, tras perder un juego en México, que conmigo no íbamos a clasificar al mundial, que se tenía que dar un cambio de timón. Esto fue en el aeropuerto en México”, dijo Pinto.
“Fue hace siete años y ya yo pasé esa página hace mucho tiempo. Fueron muy duros y muy dolorosos los primeros meses, realmente fue complicado, pero gracias a Dios he podido superar esto. Hoy en día estoy mucho más tranquilo, con más paz y serenidad. Cada vez que salga esto, estaré más tranquilo y para mí, esto es caso cerrado. Cada quien con su conciencia, pero lo que puedo decir es que ese martes (declaraciones de Pinto) ronqué muchísimo y dormí muy bien”, manifestó.
La figura del balompié tico considera que las figuras actuales del balompié nacional no pueden salir crucificados a nivel público.
“Apartándome de lo mío, hay que respetar, hay que querer y todos debemos cuidar a nuestras figuras. Aquí se dice de todo y todo se puede decir. Cuando se gana, cualquier cosa que diga la persona que está en esa situación se hace fuerte y la gente es apasionada, emotiva y ve solo una parte, al punto de dejarse llevar por esto. Cuando se levanta un trofeo o se logran cosas importantes, con la euforia solo se ve eso, pero hay que ir más allá”, dijo Wanchope.
“Cada quien puede decir lo que sea, pero no necesariamente tiene que ser la pura y santa verdad. Hay que tener cuidado. Keylor es un muchacho humilde, él salió de muy abajo y es una fuente de inspiración para muchos jóvenes. Es más, muchos van a querer seguir sus pasos y después de Keylor todos querían ser porteros, nadie quería ser delantero… Pido calma y pido mesura para ellos. Entiendo bien, se hicieron cosas muy lindas e importantes en ese Mundial de Brasil 2014 y todos estábamos felices. No dejemos que se manche eso, porque fue muy lindo para Costa Rica y es lindo para que los jóvenes vean que se puede con trabajo, disciplina y mucha perseverancia”, finalizó.