El director del diario La Teja, Felipe Arrieta, expuso este martes un incidente reciente en el que el futbolista Jefferson Brenes, volante del Saprissa, reaccionó de forma inesperada ante un intento del medio por abordar una nota humana sobre su renovación con el equipo. La renovación de Brenes había sido anunciada con una carta emotiva escrita por su hija, lo que motivó a La Teja a profundizar en el aspecto familiar de la noticia, buscando una perspectiva distinta, más cercana y afectuosa, como suelen hacer con jugadores de distintos equipos.
Al contactar a la familia de Brenes, esperando que su esposa o alguien cercano compartiera detalles de la carta, fue el propio jugador quien respondió la llamada. De acuerdo con el director de La Teja, Brenes comenzó a lanzar una serie de insultos hacia el medio, afirmando que sus periodistas son “liguistas” y reprochando la cobertura crítica que reciben él y otros jugadores. “Lo más bonito, y también tonto, que nos dijo, fue que en La Teja todos los periodistas son liguistas,” relató el director, quien señaló que Brenes pareció responder como si se tratara de un aficionado más, molesto por alguna nota de opinión.
Este evento ha llevado al director a reflexionar sobre la postura de algunos futbolistas ante la prensa y el rol que tienen los medios en el análisis y crítica deportiva. Según él, es evidente que algunos jugadores han perdido de vista el rol de la prensa en el análisis objetivo de su desempeño. La Teja, afirmó, siempre ha mantenido una línea editorial crítica y transparente, donde los periodistas están comprometidos con informar de manera imparcial, sin buscar amistad con jugadores o equipos en particular.
“En La Teja no buscamos ser amiguitos de los jugadores para que luego nos den entrevistas. No vamos a tapar cuando juegan mal para que no se enojen, pero tampoco somos mezquinos: cuando toca tirarlos para arriba lo hacemos, y su jefe, don Juan Carlos Rojas, lo tiene clarísimo,” explicó el director, haciendo referencia al presidente de Saprissa, quien ha reconocido públicamente la cobertura justa que el diario ha brindado al equipo morado. Incluso, detalló que el propio Rojas tiene algunas portadas de La Teja enmarcadas en su hogar, como muestra del respeto mutuo que han logrado.
El director del medio desafió a Brenes a encontrar una sola nota de La Teja en la que se le haya faltado el respeto o se le haya hecho algún ataque personal a un jugador. “No la va a encontrar, porque nunca la haremos,” aseveró. En cambio, resaltó que lo que sí hacen es analizar el rendimiento de equipos y jugadores y cuestionar cuando se presentan errores o se toma una decisión cuestionable en la cancha.
El incidente también refleja una situación más amplia: la percepción que algunos futbolistas tienen sobre la crítica y la relación entre medios y deportistas. Según el director, el crecimiento y la popularidad del fútbol en Costa Rica ha llevado a algunos jugadores a “endiosarse” y asumir que, debido a su estatus, pueden reaccionar de manera ofensiva si algo no les agrada en la cobertura que reciben. Este comportamiento, señaló, puede ser perjudicial para la relación entre jugadores y prensa y da pie a malentendidos, como el ocurrido con Brenes.
La posición de La Teja en este caso es clara: el medio mantendrá su línea editorial, evaluando y criticando cuando lo considere necesario, sin importar las reacciones de los jugadores. El director hizo un llamado a que los deportistas, como Brenes, comprendan el rol de la prensa en el fútbol profesional y la importancia de aceptar las críticas constructivas, sobre todo cuando estas están basadas en el desempeño y no en temas personales.
Este incidente recuerda la importancia de la prensa deportiva como un actor clave en el ecosistema del fútbol, el cual, más allá de ser un espectáculo, es un deporte que involucra responsabilidad, profesionalismo y una relación de respeto entre jugadores, equipos y medios de comunicación.
