San José, 5 ago (elmundo.cr) – El juego de esta noche entre las Selecciones de Costa Rica y México, a despertado una gran expectativa tanto por la prensa nacional como por la azteca, principalmente porque a este encuentro se le denomina el “clásico” de la Concacaf, y además está en juego el liderato de la hexagonal final.
EL MUNDO conversó con José Luis Sánchez Solá (Chelís), reconocido entrenador mexicano y comentarista para la cadena internacional ESPN, quien aseguró cosas interesantes, entre ellas la curiosidad que le despertó La Sele luego de verla jugar en Estados Unidos, y que lo motivó a venir al país para verla en vivo.
“Es mi ilusión, ver a Costa Rica en vivo, repetir lo que hizo contra Estados Unidos, me encantó lo que hizo, un fútbol muy fácil, siempre y cuando lo jueguen de la menara que lo hizo en Nueva York, de una manera casi perfecta de defenderse y casi perfecta de atacar, 11 jugadores metidos en la misma idea, me encantó” mencionó “El Chelís”.
Ante la consulta de ¿Cual es el peso de Keylor Navas en la Selección Nacional? explicó : “Créeme que igual que Gamboa, a lo que yo vi, igual, todos contribuyen, todos sacrifican, todos solidarios, y Keylor Navas lo que hace es que evita que le metan goles, y el señor Gamboa hace que su banda tenga sociedades con Ruíz, al final son iguales para un equipo de fútbol” además añadió “Si lo sacas del cuadro de la Selección, para mí (Navas) es el tercer mejor portero del mundo”.
Sobre como puede hacerle daño la Selección de México a la Nacional, “Chelís” mencionó que La Sele juega con dos carrileros que suben mucho en ataque, y que solamente quedan con tres defensores así que “México va a tener que aprovechar las espaldas de esos carrileros que suben. La fuerza de México no es el conjunto, son las individualidades, y estas se manifiestan más por fuera, con Aquino, con Lozano con Damm, Corona, ahí es donde México puede tener oportunidad, a la contra”.
“México tiene que cumplir el objetivo de ser líderes al final del torneo, y para ser líderes tiene que ganar” concluyó el analista.
