El cierre del Torneo de Apertura 2024 fue un caos total para el Club Sport Cartaginés. La goleada 6-2 ante Sporting FC no solo consumó su eliminación, sino que también generó rumores sobre tensiones extremas en el camerino durante el medio tiempo. Según fuentes de El Mundo, el ambiente se tornó tan hostil que incluso dos personas habrían sido sacadas del recinto.
La tensión en el camerino
El equipo brumoso llegó al descanso perdiendo 4-1 en el estadio Ernesto Rohrmoser, con la clasificación a las semifinales escapándose de sus manos. Según se pudo averiguar, hubo intercambios fuertes entre los jugadores y el cuerpo técnico, reflejo de la frustración al ver que Herediano, con su derrota 2-0 frente a Santos, había dejado abierta la posibilidad de clasificar.
Sin embargo, cuando al delantero Marco Ureña se le preguntó directamente en Tigo Sports si hubo golpes en el camerino, el jugador lo negó categóricamente:
“Golpes no se dieron. Estuve ahí en todo momento y no se dio ningún golpe, pero sí se levantó la voz, porque son momentos de frustración. No comparto lo que pasó, porque creo más en la comunicación asertiva y preventiva, no cuando ya se está con el agua hasta el cuello. Eso sí, reitero que no se dieron golpes”.
Ureña también expresó su descontento por la falta de reacción del equipo a lo largo del torneo:
“No sé si pasó algo o no. Al final, ya es tarde para que pasen cosas, porque si durante el torneo no sucedió algo cuando fuimos visitantes, ya no tiene caso que ocurriera algo”.
Futuro incierto para el Cartaginés
Tras dos torneos consecutivos sin clasificar, el Cartaginés enfrenta un periodo de análisis profundo. Los jugadores reconocen que se avecinan cambios importantes tanto en el plantel como en el cuerpo técnico. Durante el partido, varios aficionados presentes en el estadio pidieron la salida del entrenador Greivin Mora, reflejando el descontento generalizado.
El capitán Michael Guevara también dejó claro que el equipo falló en momentos clave y que el golpe no solo es deportivo, sino también económico para un club que arrastra deudas:
“La directiva es la que maneja todo el tema de los ajustes que deben hacer. Si uno tiene que cambiar de equipo, pues tocará hacerlo, porque no hay que conformarse con cosas que pasan. Nosotros somos culpables con muchas cosas que pasaron en el torneo… Hacer un buen campeonato y no clasificar es como nada, no vale”.
Una eliminación dolorosa
El Cartaginés cierra un torneo lleno de altibajos con la frustración de haber quedado fuera de las semifinales nuevamente. Aunque las versiones sobre lo ocurrido en el camerino se contradicen, lo cierto es que el club se encuentra en un momento crítico que requiere decisiones drásticas para retomar el camino competitivo.
Mientras tanto, los seguidores brumosos esperan que esta eliminación marque un punto de inflexión para que el equipo deje atrás los años de irregularidad y vuelva a ser protagonista en los torneos venideros.
