La Selección Nacional enfrentó una noche complicada en Surinam, donde apenas lograron un empate 1-1 que dejó muchas dudas. Al revisar las estadísticas del encuentro, queda claro que el rendimiento de los nacionales estuvo lejos del nivel esperado, con Surinam dominando varios aspectos del juego y dejando a Costa Rica en una posición incómoda.
Uno de los datos más llamativos es la posesión del balón. Surinam controló el esférico el 67% del tiempo, mientras que la Tricolor solo logró un 33%. Esta cifra evidencia las dificultades de Costa Rica para manejar el ritmo del partido y mantener la posesión, algo fundamental en este tipo de encuentros.
En cuanto a los pases, los caribeños realizaron 511, de los cuales 451 fueron precisos, mientras que los costarricenses apenas intentaron 205, completando 173. Este dato refleja los problemas tanto en la salida desde el fondo como en la generación de juego ofensivo. Las diferencias en precisión y volumen de juego hablan de un equipo que no logró imponer su estilo.
A pesar de que en los disparos no hubo una gran diferencia, con un total de 10 por parte de Surinam contra 8 de Costa Rica, el equipo local fue más efectivo al atacar. Cinco de sus remates fueron directos al marco de Patrick Sequeira, quien tuvo una destacada actuación, mientras que La Sele solo logró dos disparos al marco defendido por Warner Hahn.
Este resultado obliga a Costa Rica a ganar su próximo partido ante Guatemala, este martes, a las 6:00 p. m., en el Estadio Nacional. Un triunfo será vital para clasificar a la segunda ronda sin depender de los resultados de otros equipos.