San José, 21 dic (elmundo.cr) – La diputada de Liberación Nacional, Dinorah Barquero, expresó su preocupación y rechazo, ante los recientes acontecimientos en que tanto el Banco Popular como Kolbi, estarían en proceso de retirar su publicidad del programa de televisión El Chinamo.
“Esta decisión, motivada por la parodia realizada en la sección Chinaoke hacia el gobierno y algunos temas críticos, constituye una grave agresión para la libertad de expresión”, aseguró.
Para la legisladora “este hecho es algo inusitado en nuestra historia democrática; que un gobierno y su presidente ordenen retirar pautas publicitarias solo porque no les gusta la crítica y la diversidad de opiniones, no es aceptable en Costa Rica. Estas no son prácticas propias de un régimen democrático como el nuestro”.
“Es preocupante que estas acciones formen parte de un patrón de amenazas y represalias tanto para opositores, como para medios y espacios considerados “hostiles” por el gobierno, como ya ocurrió anteriormente con el caso de Parque Viva y La Nación”, agregó.
Barquero recalcó que “en este caso, al tratarse de un programa televisivo que goza de gran audiencia popular, tan burda intervención genera inquietudes sobre los límites que el actual mandatario parece estar dispuesto a cruzar, para controlar y monopolizar la narrativa pública”.
“No debemos pasar por alto que el mismo presidente Rodrigo Chaves ha liderado ataques, casi a diario, contra medios de comunicación que han manifestado críticas hacia su estilo y algunas de sus decisiones, como ocurrió con el periodista Héctor Guzmán y el último de ellos contra La Reacción y el periodista Danilo Chaves, en la propia Casa Presidencial”, sostuvo.
Según la liberacionista “todas estas acciones evidencian un doble rasero en el discurso del gobierno sobre la libertad de expresión, la libertad de prensa y la transparencia, baluartes fundamentales de nuestra democracia, de la tradición libre y pacífica de nuestro país; por lo que cualquier intento por censurar o limitar estas libertades representa una amenaza para la estabilidad del país”.
“Como costarricenses, debemos estar vigilantes. Pretender el control de la opinión pública, para buscar la transición hacia la construcción de un estado totalitario, donde pensar diferente es considerado un crimen, es un paso que no podemos permitir en Costa Rica”, manifestó.
Barquero hizo un llamado a las instituciones públicas y organizaciones privadas, así como a la ciudadanía en general, para defender la pluralidad de voces y la libertad de expresión que nos han definido históricamente como nación ejemplo de libertad y paz, en contraste con las diferentes dictaduras de las que han sido presa países de América Latina.
“Es oportuno recordar que la democracia no solo se sostiene en el respeto a las instituciones, a las leyes, a las reglas del juego, sino también en la tolerancia hacia la diversidad de pensamiento y la crítica. ¡Alerta costarricenses!, no debemos permitir que Costa Rica y su democracia corran más peligro. Bajo el límpido azul de tu cielo vivan siempre el trabajo y la paz“, concluyó.