El codazo que Anderson Canhoto, jugador de Alajuelense, le propinó a Diego González, lateral del Cartaginés, ha generado mucha polémica. La agresión, ocurrida durante el enfrentamiento entre ambos equipos, no fue sancionada por el árbitro William Mattus, ni revisada por el VAR debido a que este sistema no estaba funcionando en ese momento.
Según el analistas arbitrales, la jugada merecía tarjeta roja, pero la ausencia del videoarbitraje en ese instante impidió cualquier revisión. El VAR estuvo disponible a partir del minuto once, pero la falta de sanción en el momento dejó la acción sin consecuencias inmediatas.
Henry Bejarano dijo a La Teja que, al tratarse de una acción no juzgada, podría haber una sanción posterior utilizando el video. “Mattus ni siquiera dio falta o mostró una tarjeta amarilla, entonces el Disciplinario puede actuar conforme al video. Cartago puede solicitar la sanción, o el Disciplinario puede actuar de oficio”, comentó Bejarano.
Existen precedentes de sanciones impuestas tras la revisión de videos en situaciones similares, pero si el árbitro hubiese mostrado alguna tarjeta, el Disciplinario no tendría la autoridad para modificar la decisión, a pesar de que la jugada ameritara una expulsión.
Consultado al respecto por La Teja, el presidente del Cartaginés, Leonardo Vargas, aseguró que no tienen intenciones de pedir la sanción para el futbolista brasileño. “No creo, ¿ya para qué? ¿Qué ganamos con eso?”, expresó Vargas, restando importancia a la posibilidad de una apelación.
Sin embargo, lo que sí tiene muy molesto al dirigente brumoso es la actuación arbitral en general, y el uso del VAR en particular, durante los partidos de su equipo. Vargas aseguró que elevará estas quejas al Comité Ejecutivo de la Fedefútbol, del cual forma parte, para abordar lo que considera inconsistencias en la aplicación del reglamento.