El espectáculo dio inicio pasadas las 8 de la noche y sin decir nada, el artista saludó al público con una reverencia e inició su presentación.
Einaudi comenzó su concierto, cautivando a su público en el marco del Día Mundial del Piano, el cual se celebra el día 88 de cada año.
Después del éxito de las bandas sonoras de películas como “Nomadland” y “The Father”, el aclamado compositor y pianista cautivó a los ticos.
Su primera canción “Atoms”, hizo que los espectadores sintieran fuerte un vínculo con la interpretación del artista, generando el aplauso de pie al finalizar cada interpretación.
Es la primera vez que este famoso músico visita Costa Rica, el cual generó un buen sabor a los espectadores, ya que fue notable la conexión directa con el público.
Ludovico Einaudi, quien se ha convertido en uno de los referentes de la música más importantes de los últimos años, se ha hecho un camino en la industria musical, enamorando a un público muy variado, qué va desde adultos mayores, niños, jóvenes y adultos.
Por cerca de dos horas y después de interpretar algunas otras canciones de “Underwater”, el álbum motivo de su gira, se dirigió de nuevo al público y entre ovaciones, las personas comenzaron a gritar pidiéndole que tocara alguna de sus reconocidas canciones, entre ellas: “Una mattina” y “Nuvole Bianche”.
En su paso por el país, Einaudi estuvo acompañado en el escenario por un trío de músicos de primera categoría, incluyendo a Federico Mecozzi en el violín, Redi Hasa en el violoncello, y Francesco Arcuri en la electrónica y percusión.
El espectáculo “Underwater” fusionó junto a banda, la música su minimalista y emotiva de Einaudi con los juegos de luces, creando un ambiente envolvente.
Según el artista, el título del álbum refleja su interés en el mar y la naturaleza, así como en la importancia de la vida acuática en el planeta. La música es descrita como emocional, introspectiva y contemplativa, y explora temas de esperanza y resiliencia en tiempos difíciles.
Einaudi presentó una mezcla de nuevas composiciones y piezas clásicas de su repertorio, incluyendo “Divenire” y “Experience”, las cuales crearon un ambiente de introspección, paz y reflexión.