San José, 27 mar (elmundo.cr) – La Ruta del Arroz ha permitido a los costarricenses enfrentar un escenario internacional de encarecimiento histórico del precio del grano y los costos de transporte marítimo.
Según Juan Carlos Sandoval, gerente general de La Maquila Lama, sin la reducción de aranceles, el precio del arroz podría haber aumentado hasta un 50% en Costa Rica.
“Gracias a la Ruta del Arroz, hemos podido amortiguar el impacto de los precios internacionales y de los fletes, que llegaron a subir hasta un 400%. Esta medida ha sido clave para que el consumidor no reciba directamente esos aumentos en su bolsillo”, afirmó Sandoval.
El aumento en los fletes, que pasaron de $1.200 a $5.500, sumado a las dificultades climáticas en países productores de Sudamérica como Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay, presionaron los precios internacionales del arroz. Costa Rica, que importa el 80% del arroz que consume, se ha visto beneficiada por la Ruta del Arroz.
“El consumidor manda, y nuestra obligación es complacerlo, sin descuidar el precio ni la calidad”, indicó Sandoval.
Sandoval también cuestionó los datos del INEC, argumentando que no reflejan la realidad completa del mercado al considerar solo el arroz de calidad 80% y omitir las presentaciones 90%, 95% y 99%, que son las más consumidas en Costa Rica. “Es importante aclarar que en esas calidades superiores, sí se han visto reducciones importantes de precio”, aseguró.
Para el segundo semestre de 2025, el gerente de La Maquila Lama prevé un panorama positivo. “Ya desde enero y febrero de este año comenzamos a ver una disminución tanto en los precios internacionales como en los fletes. Las nuevas cosechas en Sudamérica empiezan a levantar y se espera que a partir de julio podamos tener una reducción significativa en los precios al consumidor”, explicó.
Finalmente, Sandoval enfatizó la efectividad de la Ruta del Arroz: “Hoy podemos decir con certeza que esta medida funcionó, y que el precio que paga el consumidor es mucho menor al que habría tenido que asumir de no haberse ajustado el modelo de importación. Es una política que protegió directamente al bolsillo de las familias costarricenses”.
