San José, 4 ene (elmundo.cr)- En el Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), señalan al candidato presidencial, Carlos Alvarado, de Acción Ciudadana (PAC) de caer en ‘vieja politiquería’ al decir que en el pasado fueron financiados por autobuseros.
Aseguran que al generalizar sin puntualizar: quiénes y cuánto, caen en las viejas prácticas que tanto critican.
Alvarado junto a la diputada Marcela Guerrero, la subjefa de fracción, Marlene Madrigal y otras figuras del partido indicaron que tanto el PUSC como el PLN llegan a gobernar comprometidos con quienes financias sus campañas políticas.
Estas declaraciones las realizaron ayer en la tarde, en una conferencia de prensa, que tuvo lugar en la sede del PAC.
Además, Guerrero culpó al PUSC y al PLN por el estado en el que se encuentra el sistema de transporte público. Sin embargo, estas afirmaciones son rechazas en las tiendas social cristianas.
El secretario y candidato a diputado social cristiano, Pablo Heriberto Abarca, asegura que no hubo ninguna donación por parte de algún autobusero en las últimas dos campañas.
“Sí hay algunos empresarios, sectores, uno no puede decir que porque haya un autobusero hay un problema, cualquiera puede donar, lo que es extraño es que sean 300 millones de colones (caso de Juan Diego Castro), si usted revisa los préstamos nuestros por supuesto que son montos mucho más razonables”, manifestó.
Las afirmaciones de los políticos del PAC no son bien vistas desde el PUSC quienes consideran que el caso de Castro, que es financiado por un autobusero por más de 300 millones de colones, no se compara con las donaciones que recibieron y reciben en su partido.
El PAC presentará una carta ante el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE) para que se investigue el financiamiento de la campaña de Castro, pero en esa misma conferencia, donde se hizo el anuncio, también criticaron al PLN y PUSC por las supuestas costumbres que tienen en cuanto al financiamiento de sus campañas electorales.
Abarca afirmó que quienes donan a la campaña electoral del PUSC están comprometidos únicamente con los valores social cristianos y no con otros fines como lo adujeron los jerarcas del PAC.